El hecho de tener que programar una vida alrededor de las sesiones de hemodiálisis me hizo sentir que no controlo mi propio destino, lo que genera una frustración y desesperanza constante.
me hace sentir atrapada, muchas veces esto me quita la sensación de emoción o las pocas ganas de disfrutar de las cosas, muchas veces cuando conozco personas me cuesta adaptarme y hacer amigos, tener que contarles mi condición Me es difícil porque pienso que me verán diferente o cómo alguien de cristal.
al ser este un tratamiento con riesgo a la muerte me recuerda mi vulnerabilidad y me recuerda esa realidad de no poder lograr todo lo que siempre he soñado o anhelado y ser un fracaso en la vida, desata en mi emociones intensas, desde el miedo hasta la resignación de no tener una vida como cualquier joven de mi edad.
hasta pensamientos suicidas que por las noches sobre pienso:
"Soy una carga para los demás"
Mi vida ya no tiene calidad"
"Nunca podré volver a ser quien era"
No quiero depender de una máquina para vivir"
Nunca podré ser independiente de nuevo"
No quiero prolongar lo inevitable"
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Un Pulso Artificial : Mi Vida con Hemodiálisis"
No FicciónSer paciente de hemodiálisis es enfrentar un reto diario que va más allá de las horas conectadas a una máquina. Es un ciclo constante de agotamiento físico y emocional . Las restricciones dietéticas, el impacto de tener que llevar una rutina. La hem...