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— ¿A dónde pudo irse? — la madre de Jungkook se notaba preocupada, sus manos temblaban y además servía vino en su copa constantemente pues por los nervios lo estaba bebiendo muy rápido

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— ¿A dónde pudo irse? — la madre de Jungkook se notaba preocupada, sus manos temblaban y además servía vino en su copa constantemente pues por los nervios lo estaba bebiendo muy rápido.

— ¿Pero por qué su hijo huiría así de mi pequeña? — el padre de Misuk refutó con notable enojo.

— Mi hijo no pudo haberse ido nada más así, tiene que haber una razón y la vamos a encontrar. Ya hay gente buscándolo — le respondió el padre de Jungkook de la misma manera despota.

— ¿Y si huyó de aquí? ¿de mi? — las lágrimas se hicieron presentes en la cara de Misuk al pensar tal atrocidad, su propia madre se acercó y la abrazó a su cuerpo acariciando su cabello, tratando de darle la calma que ella necesitaba en estos momentos.

El ambiente en casa de los padres de Jungkook era tenso, los padres del pelinegro estaban con preocupación y enojados, claro, habían hecho todo esto, toda una boda para que un pueblo entero disfrutase de su unión marital para que al final él huyera de casa sin explicaciones, pero estaban seguros que su hijo no haría algo así por nada del mundo, por eso estaban preocupados. Por otro lado los padres de Misuk solo sentían enojo, querían explotar de enojo además de la vergüenza que les causaron a ellos como padres de la futura novia frente a todos al dejarla ahí parada mientras ella ensayaba como consumaría sus votos frente al altar que sería en solo cuestión de dos días. A dos días de la boda y el muchacho se había fugado.

Mientras Misuk solo lloraba, sus lágrimas resbalaban y resbalaban sin parar, sus ojos ya estaban irritados y su maquillaje era la prueba de que no había parado de lagrimear grandes gotas de agua. Solo podía pensar en que había hecho mal para que Jungkook solo decidiera huir sin dar explicaciones, ¿había otra mujer? no lo podría creer si así fuera, él no le haría algo así después de algunos años de relación. Su cuerpo se alejó del de su madre y caminó hacia las escaleras, todos voltearon a verla con preocupación, a pesar de los diferentes sentimientos que tenía cada adulto en la sala sobre la situación todos compartían el mismo de empatía y preocupación por Misuk.

— ¿A dónde vas, mi vida? — su padre se acercó tomando su mano.

— Quería ver si acaso podía ir a la habitación de Jungkook —.

La señora Lee abrió sus ojos en sorpresa y volteó hacia la señora Jeon — No es necesario que lo autorice, no sé qué pasa. Quizás solo está nerviosa — dijo tragando saliva con aparente nerviosismo, pues ambas familias eran muy respetuosas en ese aspecto.

— Mamá, ¿qué tal si lo mataron? Quiero ver lo que nunca pudo enseñarme y siempre quiso. Él quería enseñarme su arte — su voz se escuchaba muy quebrada y aún sus lágrimas salían sin parar, unas más pequeñas que otras.

— Retracta tus palabras Misuk, no puedes solo suponer que está muerto— le ordenó con enojo la señora Lee — Sus padres te están oyendo —.

— ¡No! También es importante para mí, es mi prometido quien está desaparecido, es hijo de ellos, son unos padres preocupados, tú no lo entiendes porque no soy yo a quien están buscando —.

Husband|Taekook. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora