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Cruzó con prisa la calle hasta llegar a la cafetería del otro lado, hacía frío y la chaqueta que trajo ese día ya se volvía inadecuada. Al entrar a la cafetería suspiró con gusto ante el aroma del café y la calidez del lugar, miró a su alrededor y no vio a Ran. Seguro llegaría pronto.

Pidió un café negro y se sentó a esperarlo, hacía repiquetear su pierna con ansiedad. Había pensado toda la noche en lo que iba a hacer, casi no había dormido y se notó bastante eso durante su clase ya que le costaba prestar atención.

¿Qué pasaba si Ran cambiaba de opinión? Se sentiría bastante tonta en realidad.

Pasaron unos minutos más y vio como Ran se acercaba a ella, se sentó al otro lado de la mesa y Camila no supo siquiera como saludarlo.

—¿Qué te pasa? —preguntó Ran extrañado por su actitud.

—No me pasa nada. ¿Cómo estás?

—Bien, llegué tarde ya que tenía algo que hacer, ¿ya tienes una respuesta?

—Sí, y quiero hacerlo, si puedo serte útil para que todo esto con los Takiyi se acabe lo haré. Solo no quiero que nadie se entere.

Ran sonrió por eso, aunque ya estaba casi seguro de que ella respondería algo así.

—Claro, lo haremos como tú quieras.

—Y no nos conviene vernos así, ya sabes mi situación y me irá bastante mal si se enteran que hablo con alguien de una pandilla.

—No será problema, te daré mi número y para la próxima podemos ir a otro lugar menos concurrido.

—Pero primero explícame como puedo ayudar exactamente en esto.

—La pandilla en la que estoy ahora mismo tiene un buen objetivo y es entrar en el panorama criminal, una pandilla está bien pero estar al nivel de los Yakuza o incluso algo más es mejor. Los Takiyi son los que se van posicionando entre las mejores y con más alcance, es mejor para nosotros acabar con ella antes de que causen más problemas. Rindo, mi hermano y yo tenemos encargado a los de Takiyi, así que necesito que tú averigües todos sus movimientos, cuando hacen las entregas para que nosotros podamos sabotear esto, si conoces las casas donde trabajan, algún escondite.

—¿Qué pasa con todo esto si fallamos?

—Conmigo quizás nada, contigo…

—No seas arrogante —pidió frunciendo el ceño —. A ti también te matarán si descubren que conspiras contra ellos. Nos matarán a ambos.

—Supongo que es un riesgo que tenemos que asumir.

—Necesito que te comprometas a que si me pasa algo malo harás algo para ayudarme —Ran frunció el ceño —. Tomo un gran riesgo, me sería más pasable esto si supiera que alguien haría al menos algo si me encuentro en un aprieto muy grande.

A Ran le resultaba algo confuso su pedido, pero tampoco sonaba tan descabellado.

—Supongo que podría hacerlo, siempre que esté dentro de mis posibilidades.

—Decías que tenías gran control sobre Roppongi, ¿no podrías proteger a una sola persona? ¿O eran alardeos vacíos?

Ran sonrió, se cruzó de brazos y recostó su espalda en el respaldo de la silla —Tienes la lengua afilada a veces.

Se sintió avergonzada por eso, muchas veces sufría conflictos respecto a su temperamento.

—Sólo trato de asegurar mi seguridad, Ran, es todo.

—Está bien, me comprometo a eso. Pero quiero que tú también pongas de tu parte en esto.

—Y lo haré.

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⏰ Última actualización: Oct 27 ⏰

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𝘛𝘶́ 𝘯𝘰 𝘵𝘦 𝘝𝘢𝘴 ━━━━━ 𝘙𝘢𝘯 𝘏𝘢𝘪𝘵𝘢𝘯𝘪Donde viven las historias. Descúbrelo ahora