Al acabar el instituto salí con Karla cogidos de la mano, pero en la puerta me esperaban las chicas a las cuales parece que no les gustó que tuviera a una chica a la que querer, así que empezaron a insistir en que Karla no es mejor que ellas:
- David, ella no es mejor que yo- dijo la primera
- Me da igual que sea mejor o peor- le dije con desprecio
- Ella se va con cualquiera, yo me quedaría para siempre contigo- dijo la segunda
- Bueno, creo que ella tampoco se irá- le dije confiando en Karla y mirándola con una débil sonrisa.
- Pero David...- No deje acabar a la tercera.
- Me da igual lo que digáis ¡ yo la quiero a ella! - les dije con los ojos serios y donde se reflejaba el amor que sentía por Karla.
Y nos fuimos a casa, sin decir palabra de lo que había pasado al salir, simplemente nos dedicamos a comentar las primeras clases en aquel instituto nuevo para ella.
Al llegar a casa invité a Karla a pasar, pero solo había un inconveniente y era mi hermano así que nos fuimos a mi habitación sin que nos oyera, una vez allí cerré la puerta y Karla se quedó observando mi habitación. Al rato vio mi pato amarillo:
- ¿Ese pato es tuyo?- me preguntó contenta
- Sí, es mi animal favorito- le dije mirando recordando todos los momentos que pasé con él.
- El mio también- dijo con cara de sorprendida al ver que teníamos una cosa más en común.
Nos quedamos mirándonos unos instantes y le llamo su hermano desde el jardín diciendo lo siguiente:
- Hermanita, tenemos que ir a comer, baja corre- dijo con voz arrogante.
- Ya voy- dijo abriendo mi ventana y gritando.
Después mirándome a mi a los ojos me dijo:
- Me tengo que ir- me dijo con una voz suave y cariñosa
- ¿Nos vemos luego?- le pregunté con una sonrisa- Sí- me afirmó
Y se fue dejando un rastro de su olor tan magnifico por toda la habitación.
ESTÁS LEYENDO
Por un amor imposible
RomanceDavid es un niño de 16 años que esta enamorado de Karla, una chica de 16 años, simpática, amable... (ya lo veréis en la historia), pero resulta que tiene un hermano el cual se acaba enamorando también de ella, al largo de la historia observareis com...