Jungkook y Jimin se miraron, sus expresiones aún cargadas de tensión pero reconociendo la verdad en las palabras de sus compañeros. Con un suspiro resignado, el omega asintió.
—Está bien, intentaré no causar más problemas —dijo el omega intentando que su lobo no mordiera a nadie.
Jungkook, aún molesto, también asintió, aunque su actitud seguía siendo distante.
—Yo también. No es mi intención arruinar el equipo... —murmuró el alfa.
El equipo, aliviado por la aparente resolución, se preparó para dejar el gimnasio, con la esperanza de que el conflicto se resolviera y el grupo pudiera tener una buena relación.
Después de la discusión, el equipo se dirigió al vestuario para ducharse y relajarse después de una intensa práctica. Sin embargo, tanto alfa como omega no podían evitar mirarse con desprecio.
En el vestuario, Jimin colgó su toalla en un gancho y se dirigió a la ducha. Mientras estaba en el agua, intentando liberar la frustración acumulada y calmar su aroma a malvaviscos -el cual estaba potente debido al enojo- Jungkook, que estaba cerca, vio la oportunidad de desquitarse. Con una expresión traviesa, tomó la toalla de Jimin y la escondió en su mochila, tal como un niño pequeño.
Cuando el omega salió de la ducha, se dio cuenta de que su toalla había desaparecido. Asustado, miró alrededor, confundido, y se encontró con Jungkook, que estaba sentado en una esquina, aparentemente distraído.
Pero el omega sabía que había sido él.
Jimin se acercó a él, tratando de cubrirse con un boxer, susurrando con frustración.
—¿Has visto mi toalla?
El alfa, tratando de contener una sonrisa, hizo un gesto hacia su mochila.
—No sé, ¿puede que esté allí? —dijo con un tono burlón.
Jimin, al darse cuenta de lo que había pasado, frunció el ceño y se acercó a la mochila de Jungkook. En un arranque de rabia, le tiró de los pelos y lo empujó contra la pared.
El alfa jadeó totalmente sorprendido. No esperaba para nada que el omega hiciera eso.
—¡Eres un idiota! —gritó Jimin—. ¡¿Qué te pasa?! ¡Alfa estúpido!
Jungkook, sorprendido y adolorido, intentó zafarse de Jimin, pero la situación se volvió aún más caótica. Los dos comenzaron a forcejear violentamente, intercambiando empujones y gritos.
En realidad solo era el alfa tratando de sacarse de encima al omega que chillaba enojado.
Sin embargo, mientras Jungkook intentaba apartar las manos de Jimin de su cabeza, se dió cuenta de algo.
El omega estaba completamente desnudo.
—¡Alfa tonto! —chilló golpeando al susodicho con su propia mochila, la cual por fin había podido quitar de sus manos.
Jungkook estaba pálido y no sabía para donde mirar.
—¿¡Ahora no dices nada!? De verdad que no te sopor...to
Cuando el de cabello rosa chicle se dió cuenta de la situación y su evidente desnudes, tapo su lado frontal con la mochila de Jungkook.
—¡Degenerado! —el omega se puso completamente rojo para luego abrir la mochila del alfa con torpeza y sacar la toalla con una velocidad extrema.
Cuando por fin cubrió sus partes nobles con la toalla le volvió a lanzar la mochila a Jungkook para luego mirarlo con una mirada que decía: más te vale dormir con las puertas cerradas.
Sin embargo, alfa no se movía. Estaba sumido en el recuerdo reciente del pecho desnudo del omega, su cuello desnudo, sus clavículas y su...
Había visto demasiado.
Y lo peor es que no se sentía asqueado.
El ruido de la pelea llamó la atención de los demás miembros del equipo, quienes entraron al vestuario alarmados. Taehyung, Jin y los demás miraban la escena con preocupación y sorpresa.
—¿Qué está pasando ahora?— dijo Taehyung, intentando calmar la situación—. ¡Escuchamos los gritos desde afuera!
—¡No puedo creer que estén actuando así! —exclamó Jin—. ¡Esto es una locura!
Namjoon, que había regresado al vestuario al escuchar el alboroto, entró con una expresión furiosa al ver el alboroto. Su paciencia se había agotado por completo.
—¡Basta de esto! —gritó Namjoon—. ¡No puedo tolerar más este comportamiento! ¡Ambos están fuera del equipo! Si no pueden comportarse y trabajar juntos, no tienen nada que hacer aquí.
El omega abrió y cerró la boca como un pez, completamente perplejo. Miró al alfa idiota y lo fulminó con la mirada.
—¡Esto es todo por tu culpa! —chilló el de pelo chicle, mientras se acercaba a Jungkook—. ¡Todo esto empezó por tu actitud!
Pero el alfa no se iba a dejar, no con un omega pequeño y enojón.
—¡Y tú no eres mejor! —replicó—. ¡No puedes simplemente dejar las cosas como están!
—¡Ambos deben calmarse ya! —dijo Taehyung—. ¡Hasta Namjoon está enojado!
El mencionado, visiblemente exasperado, se dio la vuelta y salió del vestuario, dejando un fuerte aroma a feromonas de rabia que hizo que todos se tensaran como cuerda.
Eso era malo.
El omega suspiró y miró con vergüenza a los demás. Taehyung negó con la cabeza con decepción y se fue junto con Jin.
Jimin ajustó la toalla con recelo para luego pasar por el lado de Jungkook, sin mirarlo.
—¿Aún estás con esto? —dijo Jungkook—. No puedo creer que estemos discutiendo por una toalla.
—Claro, porque tú no ves más allá de tus propios errores —replicó el omega—. Entiendo que quisieras verme desnudo, pero esto se podría considerar acoso.
El alfa apretó los dientes con frustración.
Por culpa de sus impulsos ahora estaba fuera del equipo. Mierda. ¡No había durado ni un solo día!
Pero el omega no estaba mejor, y ambos sabían que tendrían que hacer un gran esfuerzo para recuperar su lugar en el equipo.
—Tenemos que hacer algo para arreglar esto —dijo Jimin—. No podemos dejar que todo termine aquí.
—Sí —respondió el alfa, por primera vez coincidiendo en algo que decía el omega—. Vamos a hablar con Namjoon y demostrarle que estamos dispuestos a cambiar.
—Cambiar tú, querrás decir —replicó el omega con una sonrisa burlona, mientras el alfa rodaba los ojos.
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Spike (𝗸𝗼𝗼𝗸𝗺𝗶𝗻; 𝗼𝗺𝗲𝗴𝗮𝘃𝗲𝗿𝘀𝗲) próximamente
Fanfiction៚ · ♡ | Jimin, un joven omega con aroma a malvaviscos, ama el voleibol desde que tiene memoria y sueña con convertirse en el mejor jugador del mundo. A medida que enfrenta desafíos tanto en la cancha como en su vida personal, se encuentra con viejos...