"Los secretos de mi princesa"

Capitulo 53. -Mariposas-

Tres semanas ha pasado desde la operación. Ya fui dada de alta en el hospital, y ahora estoy en casa de mi tía.
Aun no puedo saber si la operación funciono o no, ya que llevo una venda alrededor de mis ojos, no puedo quitármela porque 'podría irritar la córnea de mis ojos, y volver a quedar ciega al instante' Aunque no tengo nada que perder, ya que aún no es seguro que al quitarme la venda pueda volver a ver.

Esto es tan frustrante, es como estar atrapada en una caja de la cual no puedes salir.
Tres jodidas semanas encerrada en mi casa, sin poder exponerme a la luz solar, con una estúpida venda en mis ojos y tomando unas medicinas que saben fatal.
No creo que haya algo más estresante que eso.

Lo único que me ayuda a seguir adelante es Niall, con su dulce voz que cada día me anima más, con sus suaves caricias y su actitud tan positiva a todo. La verdad no sé qué haría sin ese hermoso rubio a mi lado.

- ¿En qué piensas mi amor?- Dijo Niall llegando al balcón donde me encontraba sentada en una silla, sintiendo la brisa caer sobre mí, esto era lo más cercano que tenía al exterior.

- En muchas cosas.- Conteste.

- ¿Como que?- Pregunto. Sentí como arrastro una silla a mi lado.

- Como en lo mucho que te amo.- Dije.

- Yo te amo muchas más mi vida.- Niall tomo mi mano y la entrelazo con la suya.

- No puedo creer que después de todo esto, no me has abandonado, a pesar de todos los problemas que te he causado sigues a mi lado. ¿Por qué? me refiero a que, pudiste alejarte, ir a buscar alguna chica la cual su vida no fuera una mierda, y ser feliz a su lado. Pero tú me elegiste a mí, con todos mis problemas. ¿Por qué?-

-Porque para mí, tu eres la mujer más perfecta del mundo. Tu forma de reír con aquella risa tan hermosa que a veces te avergüenza, pero que a mi tanto me gusta. La forma en que cuando estas nerviosa muerdes tu labio inferior, la forma en que te gusta comer el helado, primero comiendo los bordes para que al final solo quede lo del medio. Tú forma de jugar con tu pelo cuando coqueteas, esos pequeños hoyuelos que se forman cuando sonríes. Tu pequeña obsesión por que todo esté limpio, lo mucho que amas el café pero odias que queme tu lengua al tomarlo. Lo mucho que te molesta que la gente hable mal de otras personas. Y como se sonrojan tus mejillas cuando escuchas algún comentario pervertido. La forma en tus labios tiembla cuando lloras. Todas esas cosas de ti, son las cosas que amo, por eso te elegí a ti, porque tú tienes todo lo que busco en una persona, porque eres la chicas más hermosa del mundo, por todas esas y más razones te amo tanto mi amor.- Concluyo, dándome un beso en los labios.

Si no tuviera aquella venda en mis ojos, ahora mismo estaría llorando. No puedo creer que Niall notara todas esas pequeñas cosas de mí, la verdad nunca pensé que alguien las notaria, ya que no son importantes.

Pero ahora me doy cuenta lo atento que Niall es conmigo. Sin, duda es lo mejor que tengo en la vida. Soy la persona más afortunada al tenerlo.

- Niall...no puedo agradecerte todo lo que has hecho por mí, gracias...-Mi voz se cortó y agache la cabeza.

- Ya sabes que por ti hasta daría mi propia vida.- Se acercó a mi y me abrazo, yo hundí mi rostro en su pecho.

- Todos los días agradezco que estés en mi vida.- Susurre en su pecho.

- Ahí estaré por siempre.- Beso mi frente. -No lo olvides, juntos por siempre bebe.-

Alce mi rostro para juntar mis labios con los de Niall, en un beso lento.

Niall era mi felicidad, mi vida. Sin él no sé qué sería de mi vida en este momento.
Él es lo único que quiero, lo único que necesito para ser feliz.
Nunca creí amar a alguien tan fuerte como amo a Niall.