Al día siguiente, Naruto, Hinata y Hanabi estaban listos para empezar el día, pero no podían salir de casa. Kakashi les había aconsejado que se quedaran allí hasta que pudiera enviar a algunos Shinobi para vigilar a Hanabi. Debido a la situación, Naruto y Hinata habían recibido tiempo libre de las misiones para poder defender a Hanabi hasta que le cambiaran el nombre. Desafortunadamente, no podían quedarse con ella todo el tiempo. Naruto aún tenía que continuar su entrenamiento con Kakashi para ser el futuro Hokage y Hinata tenía recados que hacer. A Hanabi le habían ordenado quedarse hasta que resolvieran los problemas con el clan Hyuga. No tenían ni idea de que el Clan Hyuga era sólo uno de los problemas con los que tendrían que lidiar.
"Pensé que ya estarían aquí", comentó Naruto. "Si no me voy pronto, es probable que me pregunte dónde está Kakashi-sensei".
"No creo que le importe. Él entiende que estamos en una situación complicada en este momento", dijo Hinata antes de volverse hacia Hanabi. "¿Estás segura de que estás bien para cuidar de Boruto mientras estoy fuera?".
"No es la primera vez que lo dejas conmigo", dijo Hanabi, que mecía a Boruto en sus brazos. "Además, si voy a ser madre yo misma, voy a necesitar toda la práctica posible".
"Es cierto, pero no olvides que Naruto y yo estaremos aquí para ayudarte en lo que necesites", dijo Hinata.
En ese momento, oyeron que llamaban a la puerta.
"Supongo que ha llegado el equipo de seguridad", bromeó Naruto. "Los veré a todos esta noche, manténganse a salvo".
Naruto les dio un beso a cada una de sus esposas antes de salir. Cuando abrió la puerta, se sorprendió al ver no a la seguridad enviada por Kakashi, sino al propio Kakashi.
"Sensei, ¿por qué estás aquí?" Preguntó Naruto un poco confundido.
"La situación es más complicada de lo que pensábamos", dijo Kakashi. "¿Puedo pasar? Tenemos mucho que discutir".
"Claro", dijo Naruto, haciéndole un gesto a Kakashi para que entrara y cerrando la puerta tras ellos.
Naruto y Kakashi fueron a la sala de estar.
"Señor Sexto, ¿va todo bien?". Preguntó Hinata, sorprendida al ver que Kakashi había venido en persona.
"Desgraciadamente, sí. Creo que deberíamos sentarnos todos, porque esto va a ser duro de escuchar" dijo Kakashi, sentándose en uno de los sofás mientras Naruto hacía lo mismo.
"Entonces, ¿qué es lo último?" preguntó Naruto.
"Me temo que vamos a tener que cambiar los planes. Los tres vais a tener que quedaros en casa hasta que podamos cambiar el nombre de Hanabi", respondió Kakashi.
"¿Qué? ¿Por qué? Creí que habías dicho que enviarías Shinobi libres para mayor seguridad", dijo Naruto.
"Esa es la cuestión. Intenté conseguir ayuda, pero nadie está dispuesto a ayudar", declaró Kakashi.
"¿Son reacios a enfrentarse al Clan Hyuga?" preguntó Hinata.
Dada la reputación y la fuerza del Clan Hyuga, era de esperar que nadie quisiera luchar contra ellos.
"Ojalá fuera tan sencillo", dijo Kakashi, suspirando.
"¿Qué quieres decir?" preguntó Naruto.
"Naruto, la aldea ha crecido desde el final de la guerra, pero aún es bastante pequeña, y las noticias vuelan" inquirió Kakashi.
"Supongo que sí", respondió Naruto, aún inseguro sobre la situación.
"En pocas palabras, se ha corrido la voz sobre tu desacuerdo con el clan Hyuga, ¡y toda la aldea sabe por qué sucedió!" explicó Kakashi.
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Naruto - El precio del amor
CasualeEs posible que Hinata no fuera la única en enamorarse de Naruto. Existe la posibilidad de que su hermana Hanabi también se enamorara de él y se uniera a su relación. Al principio lo mantuvieron en secreto, pero después de que Hanabi se quedara embar...
