After Bai Yueguang Came Back, The Stand-in Left

额外(14)

Extra dulce

  Pei Xuan bajó las escaleras y, cuando Liang Huai le dijo que Yun Jin también iba a cenar con ella, se puso un poco triste.

    Especialmente cuando vio el anillo de clavos en la mano de Yun Jin.

    Pei Xuan sabía muy bien lo importante que era ese clavo para su hermano, era algo que su hermano siempre llevaba encima.

    En un encuentro fortuito hace tres años, Pei Xuan descubrió que su hermano había hecho el clavo en forma de anillo, lo probó y el anillo no le quedó bien.

    Preguntó con curiosidad a quién iba destinado el anillo, en ese momento Liang Huai contestó vagamente: «Originalmente pretendía dárselo a alguien, pero por desgracia no hubo suerte».

    En ese momento, Pei Xuan sintió curiosidad por saber quién era esa persona, y al ver que Liang Huai no estaba dispuesto a mencionarlo de nuevo, no volvió a preguntar.

    Y ahora este anillo, ¿por qué estaba en la mano de Yun Jin?

    Además, ¿era tan apropiado?

    Pei Xuan pensaba que su hermano y Yun Jin estaban jugando, que no eran reales.

    Pero el hecho de que su hermano le hubiera dado ese anillo de clavos a Yun Jin era prueba suficiente de la seriedad de su hermano.

    «Hay una olla caliente cerca, he oído que sabe bien, ¿qué tal si comemos olla caliente esta noche?». Liang Huai sabía que a Yun Jin le gustaba comer olla caliente, así que definitivamente no se negaría.

    «¡Sí!» Yun Jin estuvo de acuerdo con ambas manos, escuchó que la olla caliente cercana sabe lo suficientemente picante, el propietario es traído de Sichuan y Chongqing, el sabor es muy auténtico, Yun Jin ha querido probarlo durante mucho tiempo, pensando en esto, no pudo evitar tragar un bocado de agua.

    «¡Hermano, está claro que sabes que no como comida picante!». Dijo de repente Pei Xuan.

    «¿Por qué no nos saltamos la olla caliente y cambiamos a un plato casero?». Yun Jin se dio cuenta de que Pei Xuan no parecía tener muchas ganas de comer, así que sugirió.

    «No hace falta», Liang Huai tocó la cabeza de Pei Xuan. "Ahí tienes la olla de pato mandarín, puedes saltarte el picante".

    Pei Xuan no esperaba que su hermano, tan obediente con ella, no la escuchara ni tuviera en cuenta sus preferencias por culpa de otra persona.

    «¡Me duele el estómago, no quiero comer!».

    Pei Xuan perdió deliberadamente los nervios.

    Pero Liang Huai dijo: «Está bien, qué quieres comer, hermano te lo empaquetará».

    «No quiero comer nada.»

    Enfadada con ella, Pei Xuan fulminó con la mirada a Liang Huai y salió corriendo enfadada.

    Liang Huai mira la espalda de Pei Xuan con dolor de cabeza. «Quizá sea porque suelo mimarla demasiado, siempre se comporta como una niña delante de mí.»

    Yun Jin se rasca la cabeza. «¿No vas a perseguirla para echarle un vistazo?».

    Liang Huai negó con la cabeza: «Siempre es hora de dejarlo ir, no está bien que sigas molestándome así».

    Cogió la mano de Yun Jin, «Vámonos, vamos a comer olla caliente».

    «Un lugar público, hay gente que viene en cualquier momento, ¡estás loco!» Yun Jin estaba tan asustada que quiso retirar la mano, pero Liang Huai la sujetó con fuerza.