Estaba enfrente de la casa de ________.
Las manos me sudaban y mi corazón latía fuertemente, trate de calmar mi respiración y salí del auto. Camine hacía la puerta y la toqué un par de veces.
-¡Ya voy!-Se escuchó detrás de la puerta y luego la abrieron
-Hola.-Salude al pequeño y este frunció el ceño
-¡_________, tú novio el famoso, esta aquí!-Anunció gritando y no pude evitar reír.- ¿Qué quieres?-Preguntó cruzándose de brazos
-Eh...-Contesté nervioso.- Bueno...
-Me veré muy pequeño pero tampoco soy idiota.-Dijo.- Hoy tuve que dormir con ella, porque tuvo pesadillas por tú culpa.- Comentó y trague saliva
Baje la cabeza.
-Pasa.-Dijo y entré
-Soy un idiota, ¿Sabes?, no era mi plan que esto pasara. Yo la amo y vine a buscarla porque quiero arreglar esto.-Dije y el hizo una mueca.-También sé que le han roto el corazón muchas veces y yo no quiero hacerlo.
-Eso no me lo digas a mi, díselo a ella.-Dijo haciendo una seña con la cabeza
Me di la vuelta y ________ estaba allí. Se veía diferente, no sé que era, pero se veía diferente.
-¿Qué... que haces aquí?-Preguntó ella terminando de bajar las escaleras
Se supone que venía a arreglar lo todo, pero no sabía como expresarme.
-Vine a tratar de reparar todo esto.-Ella se cruzo de brazos.- Se que estas enojada, sé que te sientes herida. Y yo tengo la culpa de que estés así, y aunque no lo creas a mí también me duele. Soy un estúpido. Nunca debí haberla besado. Me arrepiento de haberlo hecho. Sé que todos los chicos dicen lo mismo.-La miré y ella sonrió un poco.- Pero yo no quiero ser de esos chicos que rompen el corazón de una chica y no lo reparan. Yo quiero ser de esos chicos que tomen las piezas rotas y traten de arreglarlas.- Suspiré.-
»Quiero que me perdones y si no quieres volver conmigo, lo entiendo. Porque como ya dije soy un idiota.- Dije mirándola.- Y no sabes cuantas veces te eh necesitado. Esto ya no es fácil porque desde el momento en que te encontré ya no te quise dejar ir.-Dije por último con la voz entrecortada
Ella miró al piso unos segundos y cuando volvió a mirarme sus ojos estaban llenos de lágrimas. Me aclare la garganta y me acerqué a ella, tenía los brazos a ambos lados, así que la abracé. Ella no se movió.
-Liam...-Susurró ella escondiendo su rostro en mi cuello
La abrace más fuerte y traté de no llorar, pero me era imposible.
-Te necesito.-Dije separándola de mi
________ se seco las lágrimas, me miro a los ojos y luego se llevo las manos a la boca. Fruncí el ceño sin comprender nada. Corrió hacía un extremo de la casa y entro a un cuarto. Seguramente el baño. Camine hacia allá.
-¿_________?-Pregunté y solo se escuchó el sonido del agua
Entre sin pensarlo dos veces y encontré a _________ sentada en el piso con las manos en la cara. Me acerqué a ella y me senté a su lado, la abracé.
-¿Estas bien?-Susurré preocupado pero ella no respondió
Quiso alejarse de mí pero no la deje.
-Ya no pienso dejarte volverte a dejar ir.- Dije acariciándole el pelo
-Liam...-Susurró.- Ya no podemos estar juntos, firme un papel.-Me recordó
-¡Al diablo el papel!-Dije enojado.- Que haga lo que le plazca, mientras tú estés conmigo, te prometo que nada te va a pasar.
Ella se quito de un jalón y me miro con dolor.
-¡Tú prometes muchas cosas!-Gritó con rabia.- ¡Nunca las cumples!-Dijo y se volvió a derrumbar en el piso
No me moví, simplemente me quede mirando la pared.
Ella tenía razón, le había prometido muchas cosas... y rompí todas.
Las lágrimas comenzaron a salir y yo no me había dado cuenta. Las sequé y me acerqué a ella.
-Ya te lo dije, no te voy a dejar ir.-Repetí y la toma del mentón.- Recházame una y otra vez. Pero que te quede claro algo. Nunca te voy a dejar sola.- Afirme y la bese.
Sus manos se colocaron en mis mejillas y comenzó a temblar. Las lágrimas salían, pero algo que de verdad importaba es que, estábamos juntos y eso nadie, lo iba a cambiar. Nadie.