Naruto - Sólo una tienda de polvo

Capítulo 6: Nunca te abandonaré

"Estás yendo demasiado lejos con esto".

"Me equivoqué. Te sobrepasé..."

Ruby Rose estaba a punto de gritar.

No era por miedo, odio o tristeza.

Tenía una razón diferente para querer gritar a todo pulmón.

Caminaba por los pasillos de Beacon, pensando en la noche anterior con buenos recuerdos. Dijo: "Bueno, ver a sus padres besándose no era un acontecimiento que quisiera recordar pronto".

Su mente volvió a la conversación que habían tenido la noche anterior, ellos tres solos.

"Siempre habrá otro monstruo, Ruby. Eso es lo que la gente no se da cuenta". Naruto suspiró mientras le acercaba un vaso de leche caliente. "A veces, necesitas un monstruo para mantener alejados a otros monstruos".

Ruby cogió el vaso y dejó que su calor aliviara sus frías manos. "¿Y eso es lo que eres?

"Buena chica", dijo él, dándole una palmada en la cabeza y despeinándola. "Estás aprendiendo".

Ella arrugó la nariz. "¿Cuántos hermanos tengo?

"Bueno, hay más de los que crees, pero menos de los que esperas".

Ella infló las mejillas y dijo: "¡Papá! ¡Eso no es una respuesta!".

Summer se encogió de hombros. "Es lo mejor que puedo hacer por ahora".

Ahora tenía más hermanos.

En otro tiempo, eso podría haberla inquietado, sembrado la duda y envenenado su interior. Pero ahora no. Sus padres habían estado separados durante quince años, casi dos décadas, pero ella lo había superado. Ahora estaban juntos de nuevo. Nada más importaba.

Bueno, algunas cosas, tal vez.

Cosas relacionadas con la chica del ceño fruncido, que caminaba sólo dos pasos por delante de ella.

¡Weiss era su hermana!

Eso también significaba que los "Winter" y "Whitley" que Naruto seguía mencionando ¡también eran familia! Ella siempre había querido tener una gran familia. Sólo de pensarlo se emocionaba.

"Ahora recuerda, Ruby", la voz de papá volvió a ella de golpe. "No puedes contárselo a Weiss. Tiene que resolverlo sola".

Ruby lo respetaba. De verdad que lo respetaba. No se lo diría, por supuesto, no cuando papá quería soltar la bomba él mismo. ¡Pero era tan difícil! Parecía encontrar parientes que no conocía dondequiera que mirara. A este paso, Blake también iba a ser su hermana.

Tropezó y perdió un paso.

Frunció ligeramente el ceño.

Un momento.

Papá había mencionado el nombre "Kali Beladonna" en la tienda. El apellido de Blake era Belladona. Eso hizo que Ruby pensara inmediatamente en una conexión.

Weiss vio su sonrisa y frunció el ceño. "¿Por qué estás tan contenta de repente? Llevas así toda la mañana".

Rubby soltó una pequeña carcajada. "Por nada, la verdad. Absolutamente ninguna".

El arco de Blake se crispó. "¿Estás segura?"

Ruby estaba muy contenta. "Sí", dijo.

Yang dejó escapar un suspiro. "Ruby".

"Luego te cuento, hermanita". La pequeña parca sonrió y saltó delante de ellos. "¡Vamos! Vamos a llegar tarde a clase".

Yang no se dio cuenta de que Weiss y Blake se quedaban atrás.