Rifthan , el nombre de la obsesión. +21

Dónde están?!

El Agente León se sentó junto a Mia en el vehículo, mientras conducían hacia su destino.

"Mia, necesito explicarte el plan", dijo.

Mia se volvió hacia él, atenta.

"¿Qué plan?", preguntó.

El Agente León miró por el espejo retrovisor antes de continuar.

"Vamos a llevarte a un lugar seguro, donde los Patrov no puedan encontrarte", dijo. "Un lugar donde podrás empezar una nueva vida".

Mia se sorprendió.

"¿Una nueva vida?", repitió.

El Agente León asintió.

"Sí. Vamos a cambiar tu identidad, tu apariencia, todo. Serás una persona diferente".

Mia se quedó en silencio, procesando la información.

"¿Y qué pasa con Rifthan?", preguntó finalmente.

El Agente León se encogió de hombros.

"No lo sé, Mia. Pero debes entender que Rifthan está en peligro. Los Patrov lo buscan y no descansarán hasta encontrarlo".

Mia frunció el ceño.

"No puedo dejarlo", dijo.

El Agente León la miró con seriedad.

"Mia, debes pensar en tu propia seguridad. Rifthan quiso protegerte, ahora es mi turno".

Mia suspiró, sabiendo que el Agente León tenía razón.

"Está bien", dijo. "Haré lo que deba hacer".

El Agente León sonrió.

"Excelente", dijo. "Ahora, vamos a llegar a nuestro destino ", condujo durante horas, hasta que finalmente llegaron a un pequeño pueblo en la costa. Mia miró por la ventana, viendo la playa y el mar.

"¿Dónde estamos?", preguntó.

El Agente León sonrió.

"Estamos en un lugar seguro", dijo. "Un lugar donde podrás empezar de nuevo".

Mia se sorprendió al ver una casa pequeña y acogedora en la playa.

"¿Es aquí?", preguntó.

El Agente León asintió.

"Sí, es aquí. Esta es tu nueva casa".

Mia se emocionó al ver la casa. Era perfecta.

"Gracias, Agente León", dijo.

El Agente León sonrió.

"De nada, Mia. Ahora, vamos a entrar y a conocerte a tu nueva identidad".

Mia se rió nerviosamente.

"Estoy lista", dijo.

El Agente León la llevó dentro de la casa, donde había una mujer esperando.

"Hola, Mia", dijo la mujer. "Soy Sofía. Estoy aquí para ayudarte a adaptarte a tu nueva vida".

Mia sonrió.

"Hola, Sofía", dijo.

Sofía le entregó a Mia un sobre.

"Este es tu nuevo documento de identidad", dijo. "Tu nuevo nombre es Emma Taylor".

Mia abrió el sobre y miró el documento.

"Emma Taylor", repitió.

Sofía sonrió.

"Sí, Emma. Ahora eres una persona diferente. Una persona segura".