Michelle

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Invierno, clima perfecto en lo personal. Me encontraba en mi oficina, escuchando algo de música mientras escribía en mi Laptop, me aleje un poco y mire por la ventana, me perdí entre mis pensamientos cuando mi teléfono timbro repetidas ocasiones, me acerque para tomarlo y conteste inmediatamente.

−Hola – saludo Eli al otro lado del teléfono

−Hola, ¿pasa algo?, te escuchas agitada –

−No, estoy bien, bueno quería pedirte un favor –

−Dime –

−Bueno es que en un par de horas Nancy me presentara a alguien y estoy muy nerviosa, y quería saber si podrías acompañarme −hablo rápido

−Entiendo, ¿a que hora? – pregunte

−En una hora y media – contesto un poco más relajada −será en el centro comercial –

−Está bien, nos vemos – me despedí de ella

−Ahí nos vemos, gracias, te quiero – exclamo emocionada solo giré los ojos y colgué la llamada.

Seguí con mi trabajo, poco después tocaron la puerta de mi oficina, solo contesté con un

"pase", era Jocelyn.

−Hola – saludo y se sentó frente mío

−Hola, ¿paso algo? –

−No, solo venia invitarte a almorzar, bueno si puedes y quieres – exclamo.

Ella se a portado muy amable conmigo, es atenta y cariñosa, la estimo demasiado y la quiero como si fuera mi hermana, nos conocemos desde los 16 años, solo que nos separamos cuando me vine a Suiza, nos reencontramos aquí nuevamente y trabaja conmigo, a estado conmigo en los tiempos buenos y malos, nunca la e visto de otra forma, solo como una hermana, amiga, etc.

−Bueno, iré a ver a Eli, esta vez no podre acompañarte – exclame algo apenada

−No te preocupes, por cierto, venía a recordarte sobre la firma con la librería, será en un mes creo –

−cierto, lo olvidaba, gracias por recordármelo – ella solo rio y me miro como si quisiera hablar

−bueno, debo irme, ten cuidado y me saludas a Eli – se levanto y camino hacia la puerta.

−gracias, yo le doy tus saludos – dije y ella solo sonrió y salió de mi oficina.

Continue con mi trabajo por unos minutos más, pero me quede sin ideas, opte porque era mejor irme, salí de mi oficina y baje a donde se encontraba mi auto, subí y conduje hasta el centro comercial, supuse que sería en la cafetería de siempre, le escribí y ella lo confirmo. Llegue al lugar y salude a los chicos que se encontraban ahí, pedí mi orden y me senté en la mesa cerca de la ventana. Ella tardo en llegar seguida de dos chicas que no vi bien.

Eli se acerco a mi para abrazarme, le correspondí el abrazo, Eli se sentó a lado mío, la chica pelinegra se sento frente a mio y la castaña frente a Eli, estaba en su teléfono.

Dime que no es ella.........pero...

Ella levanto su vista me encontré con la de ella ay no, trágame tierra y escúpeme en otro lado.

−Esto es una broma – murmuro sin desviar la vista

−Pienso lo mismo – exclame

−¿se conocen? − pregunto la chica a su lado

Amabas desviamos la mirada.

−Si – contesto soltando un suspiro.

−Desgraciadamente – dije

Hay almas que se pertenecenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora