Esposas por Contrato

Capítulo 3

Me levante lo mas temprano posible, me vestí casual Karime por suerte aún seguía dormida, no la quise decir nada, pero le deje una note de su lado de la cama que me iba a la casa de mi hermana porque ya sabía que estaba en México y que volvía hasta la noche.

Baje las escaleras y me recibieron las señoras que hacen la limpieza.

-Buenos días señora, gusta algo por desayunar. -me dice una de ellas.

-No, gracias Margarita desayuno por el camino. -le digo con una sonrisa y ellas me devuelve el gesto.

Al salir por la puerta gigantesca de la casa veo cuatro autos estacionados y cuatro hombres con traje, les doy los buenos días en general y ellos hacen un saludo cordial.

Al terminar de saludarlos uno de ellos con tez blanca, pelo negro y alto se acerca a mi y me dice que es mi chofer y que se llamaba Pedro y que en lo que necesite el estará a mi servicio.

-Hola como estas Pedro, un gusto, podría llevarme a algún lado yo le digo donde mismo, por favor. -le digo y el asiente rápidamente.

-Claro señora, esa camioneta que vez allá esa roja, es la que la señora Pindter puso a su disposición, donde usted diga yo la llevare. -me dice amablemente de nuevo.

La camioneta era una BMW Serie X color roja, esta hermosa, no me lo podía creer, había tres igual solo que de distintos colores y una Mercedes Benz AMG G63 color negra, se veía muy elegante también, todo como la representa a la familia Pindter.

-Pedro, esa mercedes negra de quien es. -le digo y el me mira por el retrovisor, ya estábamos camino a la casa de mi hermana.

-Oh esa es del señor Pindter, es coleccionista de los autos en especial de la marca, por lo que dicen por ahí es uno de los accionistas de Mercedes Benz de México. -me dice y sigue conduciendo.

Al llegar a la casa de mi hermana le digo a Pedro que pude volver a la casa que cuando yo lo necesite lo iba volver a llamar, veo como se despide y se va.

Antes de entrar a la casa de mi hermana hago un suspiro profundo como si así se iría todos mis nervios. Debía de decirle que estaba casada, no sabia como, iba con esa idea hasta que el ascensor de su piso llega a su puerta, estaba por darme la vuelta y regresar a la casa, pero mis manos fueron más rápidas y tocaron la puerta.

Al ver abrirse esa puerta veo a Bama, ha crecido extremadamente, esta mucho mas alta que la ultima vez que nos vimos, en menos de un segundo nos abrazamos tan fuerte que mi pulmón me estaba pidiendo aire.

-Mi pedorra favorita, wow, estas bastante grande, desde la ultima vez, hasta nos volvimos a pintar el pelo, me encanta, es muy tu estilo. -le digo y nos volvemos a abrazar.

-Bama mi amor quien es. -dice mi hermana llegando a la puerta y al verme veo como corre a abrazarme también.

-Hermane de mi vida y mi corazón, te extrañe bastante, pensé que era una broma cuando me dijiste que estas por México.

-No jugare con eso Beba, sabes que no soy así. -le digo y nos volvemos a abrazar.

Después de todo el saludo que nos dimos nos pusimos a desayunar en familia, aun necesitaba tiempo para decirle a mi hermana que su hermana estaba casada, pero no sabia como, me estaba llevando la que me debería de estar entrando, mi mente me estaba por matar de tanto que andaba pensando.

-Gala, que te pasa hermana, estas muy ida. -me dice y yo alzo la cabeza para mirarla.

-Beba debo de decirte algo, capaz me odies por lo que te diga, pero lo necesitas saber, solo te pido que no me bombardees con tantas preguntas, te voy a decir todo, pero te lo iré diciendo con calma, solo escúchame y luego me haces las preguntas que quieras. -le digo agachando la cabeza, no quería mirarla a la cara.