La ventana de Berta

V

Al padre de Berta casi se le cae el plato de comida al suelo. Se acercó a su mujer y notó que ya no respiraba. Se entristeció mucho. Se lo ocultó a Berta dos días, pues estaban en época de exámenes y no quería que sus notas bajasen por eso. El padre de Berta era muy calculador.

Al día siguiente, mientras Berta estaba en el colegio, su padre llamó para que se llevasen el cuerpo. Berta en el colegio hizo el examen y volvió a casa en el autobús, como de costumbre. El padre de Berta estaba triste por ocultarle eso a su hija, pero decidió que era mejor así.

Acabados los exámenes, Berta trajo sobresalientes a casa con una sonrisa. Su padre se alegró mucho por ella. Decidió esperar al día siguiente para decírselo, pues no quería arruinarle esa felicidad a Berta.

Para mantener a Berta feliz, fingió viajes con el plato de comida al cuarto de su madre, pero pronto Berta empezó a sospechar.