Héctor no parecía dispuesto a hablar allí sobre eso, así que él y su hijo fueron a una cafetería para resguardarse del frío que había en el cementerio. Allí se quitaron las chaquetas y se sentaron en una mesa. Una camarera amable se les acercó.
-Buenas, ¿desean algo para beber?- sonrió la camarera.
Héctor respondió.
-Si, por favor. Pónganos 2 chocolates calientes.
-Y con nubes! - se apresuró a decir Aaron.
La camarera conocía a ese dúo, les sonrió y dijo:
-Claro que si Aaron.
La camarera se fue a atender otra mesa en la que estaba una chica de su colegio. Aaron la reconoció. Se saludaron con la mano desde su sitio. Después Héctor y su hijo se miraron serios para conversar sobre esa tal...Berta.
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La ventana de Berta
TerrorTodo empieza con una visita en el cementerio. Pero cuando se encuentra una tumba con coincidentes apellidos el hijo de Héctor decide preguntar. Esta pregunta desencadena un tema tabú en la familia de.... Berta García 25 de abril de 2019 (Historia...