EL GATO DE TAEHYUNG

III.

Al llegar la noche, Taehyung se encerraba en su cuarto como hacía todas las noches , y su fiel gato tomaba lugar a la cabecera de su cama.

Había llevado una pequeña camita para Tannie y la colocó al costado de su cama.
Todo parecía paz y tranquilidad, Tannie estaba lleno de comida y roncaba a pierna suelta.

Pero Bohoja no dormía, el nunca dormía.

El vigilaba.

Y todas las noches, a las 3.33 de la madrugada, se sentían unos golpes en la puerta. Eran suaves pero firmes.

3 únicos golpes que indicaban que alguien estaba al otro lado, y que quería entrar.

Bohoja se erizaba, y se preparaba con toda su furia para atacar al agresor. Pero , es sabido que los entes malvados sólo pueden ingresar si las puertas están abiertas, o si se les permite entrar.

Así que todas las noches se repetía el mismo patrón. Taehyung dormía, y Bohoja vigilaba.

Al día siguiente Bohoja dormía todo el día como todos los gatos lo hacen, y nadie se percataba de lo que acontecía.

Bohoja amaba a Taehyung. Y amaba cuidarlo.

Tae había comenzado a experimentar un dolor crónico en uno de sus brazos, el brazo izquierdo, justo en el codo. Y a veces le dolía el hombro. Era un dolor constante como una rutina y había mañanas que el dolor era tan fuerte que a duras penas podía mover el brazo.

Varios médicos lo habian visto , pero jamás encontraban la razón de su mal.

Aducían la mala posición en el sueño, una dolencia por el frío.
El trabajo excesivo de cargar los pesados libros.

Quizás un dolor reumático temprano.

Pero todas las mañanas, Taehyung amanecía con el dolor. A veces tenue, a veces fuerte.
Tomaba pastillas para el dolor y seguía con su vida, pues no había nada más que hacer.

Los días de Octubre transcurrían lentamente , y Bohoja miraba a la calle desde su ventana favorita.

Quien lo viera así todas las tardes, diría que observaba un pajarito o una mosca volando cerca.
Quien sabría de todas las vivencias que ese gato tenía a cuestas.

Y es que el problema comenzó sin querer debido a Tannie.
Al ser éste un perro joven , el pequeño quería jugar a mitad de la noche , o pedía ir al baño constantemente.

Entonces Taehyung comenzó a abrir la puerta en la noche, y dejar la puerta abierta para que el joven Tan pudiera entrar y salir a su gusto.

Entonces, desde hacia un tiempo, Bohoja comenzó a luchar.

Todas las noches, el ente entraba a su cuarto y se posaba al lado de la cama de Taehyung, exactamente a las 3: 33 a.m

Taehyung comenzó a sufrir pesadillas, soñaba que estaba completamente paralizado, y que algo o alguien lo sujetaba del brazo y luego lo arrastraba llevándoselo rápidamente por unos parajes desolados.

Él sentía mucho pavor y luchaba para liberarse, pero éso era muy fuerte y olía a rancio. Y Taehyung no podia moverse.

El monstruo tenía unos brazos largos y horribles , llenos de cicatrices, y su rostro no podía descifrarse , como una mancha oscura, pero su aliento putrido era aterrador.

También soñaba que un hombre grande y fuerte llegaba y luchaba por liberarlo.

Tenía el pelo blanco y los ojos profundos y oscuros . Usaba un tipo de armadura blanca con adornos dorados. Tambien tenía una mirada feroz y a la vez amorosa cuando se posaba en él.

Su cuerpo era musculoso y su voz profunda. Se enzarzaba en luchas épicas con el ser macabro que se lo llevaba , gritando y gruñendo mientras Taehyung trataba de escapar. Luchaban como dos fieras salvajes.

Cada noche, por cerca de un mes ya, el guerrero salía vencedor.

Y herido como estaba, se acercaba a Taehyung , lo levantaba y llevaba en brazos por el amplio paraje, lo tranquilizaba con su voz dulce y profunda, para luego depositarlo con delicadeza en su cama.

A veces Taehyung se quedaba contemplandolo, y el guerrero sonreía.

Otras veces le preguntaba su nombre y el guerrero le respondía "Jungkook".

Le decia que ése solía ser su nombre. Que se conocían de otras vidas, y que siempre estarían juntos.

Que nada nunca los separaría.

Y cada mañana Taehyung despertaba con su gato enrollado cerca de su cabeza y un fuerte dolor en el brazo, que a veces se irradiaba hasta el hombro.

Y Taehyung pensaba que las pastillas para el dolor le estaban causando extrañas pesadillas, o que sólo estaba muy estresado.

Pero cada vez su viejo gato estaba más débil y cansado. Su cuerpo se veía maltratado, su pelaje se veía cada vez más hirsuto y ya no comía casi nada.

Se le veía enfermo y desgastado, así que Taehyung decidido llevarlo al veterinario.

El médico lo revisó con cuidado, pero no encontraba nada físico a que atribuirle a su estado desmejorado.

Esta viejo, le decía , ya su cuerpo está muy cansado. Quizás debes considerar dejarlo ir.

Pero Taehyung sabía que algo más pasaba con su pequeño Bohoja, y sabía que tenía que hacer algo. Intentar más cosas.

Comenzó a investigar métodos para mejorar su calidad de vida, remedios caseros, comidas selectas, intentaba de todo.

Si tan sólo hubiera sabido que era lo en realidad pasaba.

Mientras tanto Bohoja lo miraba con profundo cariño, se levantaba a duras penas de donde descansaba para enrollarse en su cuello, ronronearle suavemente y pegar su frente a la de su dueño en un signo profundo de amor.

El daría la vida por Taehyung si era necesario. El lo cuidaría hasta su último aliento. En esta vida, ese era su destino.