Cosmus

Capítulo VI: Un rival. Parte 2

(Días después)

Azrael observaba desde lejos cómo Julian y Lylah reían juntos en el patio. Su expresión se volvió más seria.

Azrael: (para sí mismo) Esto va demasiado lejos.

(Lylah se acerca a Azrael)

Lylah: ¡Azrael! ¿Qué pasa? Te veo pensativo.

Azrael: Nada, solo pensando en un proyecto.

Lylah: ¿Quieres ayuda?

Azrael: No, gracias. ¿Y tú? ¿Qué pasa con Julian?

Lylah: Nada, solo hemos Estado estudiando juntos.

Azrael: ¿Con frecuencia?

Lylah: Sí, es un buen compañero de estudio.

Azrael: Me alegra (contestó de manera fría)

(Lylah nota el cambio en la actitud de Azrael)

Lylah: Azrael, ¿estás bien?

Azrael: (forzando una sonrisa) Sí, estoy bien.

(Más tarde ese mismo día)

Arin se acercó cuidadosamente a Azrael, que estaba sentado solo en la mesa de la cafetería, sumido en sus pensamientos. Su expresión era intensa, como si estuviera luchando contra sus propios demonios.

Arin: Hey, Azrael, (dijo suavemente, sentándose a su lado).

Azrael se sobresaltó, saliendo de su ensimismamiento.

Azrael: Oh, hola Arin. ¿Qué pasa?

Arin: (lo miró con preocupación) ¿Qué te pasa a ti? Pareces distraído.

Azrael: (se encogió de hombros, evitando la mirada de Arin) Nada, solo pensando en cosas.

Arin no se creyó la excusa, pero no insistió. Sin embargo, su mirada intensa parecía decir que sabía que había algo más. Azrael se sentía incómodo bajo la mirada de Arin, especialmente porque sabía que ella era muy perspicaz. No quería admitir que estaba pensando en Lylah y Julian, y cómo se sentiría si se convirtieran en pareja.

Arin: Sé que algo te preocupa. ¿Por qué no me dices?

Azrael: No es nada, de verdad.

Arin: (sonrió ligeramente) Está bien, no me lo digas ahora. Pero puedo intuir que tiene que ver con Lylah, ¿verdad?

Azrael se sorprendió, pero no respondió.

Arin: (continuó) Vamos a visitarla después de clases. Quizás eso te ayude a despejar tus pensamientos.

Azrael se sintió tentado. ¿Sería una buena idea ver a Lylah? ¿O solo empeoraría las cosas? Pero fue más su deseo de poder estar con ella, así que aceptó, luego de que terminaron las clases, tuvo que quedarse un rato más a ayudar a Arin con una copias y así acabar rápido e irse juntos.

Cuando estaban llegando a casa de Lylah, una llamada interrumpió la conversacion de Arin y Azrael

Arin: ¿Hola?.... Sí, dime.....Enserio? Justo ahora?.... Sí, tenía planes..... Es tan urgente?..... Está bien, voy para allá. (Colgó)
Arin: (ahora volviéndose hacia Azrael) disculpame, surgió una emergencia en casa y debo volver de inmediato, igual ve con ella, lo necesitan.

Y antes de que Azrael pudiera decir algo, Arin se fue, el siguió caminando hasta que llegó a la casa de Lylah, se sentía nervioso pero sabía que era necesario. Llamó a la puerta y la madre de Lylah respondió.

Mamá de Lylah: ¡Azrael! ¡Qué sorpresa! Pasa, por favor.

Azrael la saludo con una sonrisa y entró en la casa. La mamá de Lylah lo guió hasta la habitación de Lylah.

Mamá de Lylah: Lylah, tienes visita.

Lylah: (desde dentro) ¡Entra!

Azrael abrió la puerta y se detuvo en seco. Julian estaba sentado en la cama de Lylah, rodeándole los hombros con el brazo.

Lylah: (sorprendida) Azrael... ¡No esperaba verte!

Azrael: (intentando mantener la calma) Hola, Lylah. Julian.

Julian: (sonriendo) ¡Azrael! ¿Qué te trae por aquí?

Azrael: (forzando una sonrisa) Solo pasaba de visita, quería ver a Lylah...

Lylah: que bueno, ya extrañaba mucho que vinieras.

Lylah se levanta y abraza con cariño a Azrael y él le corresponde el abrazo, pero no muy contento Julian, se levanta de inmediato tomándola por el brazo.

Julian: disculpa, vi que tenías un animal en el brazo, pero creo que me confundí

Azrael: te incomoda que me abrace? (Preguntó desafiante)

Julian furioso a punto de darle darle un golpe a Azrael, cuando recibe una llamada

Julian: (mirando su teléfono) Lo siento, tengo que atender esto.(despidiéndose) Nos vemos luego, Lylah.

Lylah: Claro, adiós (dijo algo confundida con lo que acababa de pasar).

(Julian sale rápidamente de la habitación)

Azrael: Lylah...

Lylah: ¿Qué pasa? ¿Por qué parecía que iban a empezar una pelea?

Azrael: (acercándose a ella) Nada... solo quería asegurarme de que estés bien.

Lylah lo mira a los ojos y ve la sinceridad en ellos

Azrael: (abrazándola suavemente) Me alegra verte.

Lylah: (abrazándolo también) Me alegra verte a ti.

Se quedan en silencio por un momento, disfrutando del abrazo.

Mamá de Lylah: (desde afuera de la habitación) Lylah, cariño, tengo que salir a hacer unas compras. Regresaré en una hora.

Lylah: (abre la puerta) ¡Okay, mamá! No hay problema.

Mamá de Lylah: (sonriendo) Azrael, qué bueno que aún sigas aquí, creí que te fuiste con el otro muchacho. Puedes hacerle compañía a Lylah en lo que regreso, más en estos días que se meten a las casas a robar, porfavor cuídala, yo volveré muy pronto.

Azrael: (sonriendo) Claro, señora. No se preocupe.

(La mamá de Lylah sale de la casa, cerrando la puerta)

Lylah: (volviendo a sentarse en la cama) Bueno, parece que estamos solos, diablos, olvidé pedirle que me traiga algo de comer.

Azrael: (sentándose junto a ella y sonriendo) enviale un mensaje, tonta.

Ambos comienzan a reír hasta caer acostados en la cama, luego hay un momento de silencio entre ellos, pero no es incómodo

Lylah: (mirándolo) Azrael, gracias por venir hoy.

Azrael: (sonriendo) De nada, Lylah. Me alegra verte.

Lylah se acercó un poco más a Azrael, su rostro cerca del suyo. Con dedos suaves, le quitó un mechón de pelo que caía sobre su ojo.

Azrael sintió un escalofrío recorrer su espalda. La proximidad de Lylah lo hacía sentir vivo.

Lylah: (sonriendo) Te queda bien el cabello así.

Azrael: (callado, mirándola fijamente)

La tensión entre ellos era palpable. Azrael podía sentir el calor de Lylah, su aroma dulce y embriagador.

Sin pensarlo, Azrael tomó a Lylah de la cintura, atrayéndola hacia él. Su voz fue apenas un susurro.

Azrael: Lylah...

Lylah se estremeció, su corazón latiendo con fuerza. Miró a Azrael a los ojos, buscando una respuesta.

La habitación parecía desvanecerse, dejando solo a los dos, suspendidos en el tiempo.