Capítulo III: sombras

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La figura desconocida había Estado siguiendo a Lylah y Azrael desde que se conocieron en la universidad. Había estado observando cómo su relación crecía y se fortalecía. Trataba de conocer todo a cerca de ellos.

Sabía cómo se habían sentado juntos en clase, cómo habían compartido sus primeras conversaciones y cómo habían descubierto su conexión mutua. Había visto cómo se apoyaban, cómo se reían juntos y cómo se habían convertido en inseparables.

La figura desconocida había estado siguiendo cada momento que pasaban juntos, cada gesto, cada palabra. Sabía sobre sus intereses, sus pasatiempos y sus planes para el futuro.

Un día, mientras Lylah y Azrael caminaban por el campus, sintieron una sensación extraña. Como si alguien los estuviera observando. Se miraron entre sí, pero no vieron nada fuera de lo común.

"¿Te sientes bien?", preguntó Azrael.

"Sí, solo tengo una sensación rara", respondió Lylah.

Azrael la tomó de la mano. "No te preocupes, estoy aquí".

La figura desconocida sonrió en la oscuridad. Pronto, Lylah y Azrael descubrirían su verdadero propósito. Pero por ahora, seguirían viviendo su vida normalmente, sin saber que alguien los estaba observando.

Días pasaban y Lylah y Azrael seguían creciendo juntos. Estudiaban juntos, exploraban la ciudad juntos. La figura desconocida observaba cada momento, cada gesto, cada palabra.

Una noche, mientras paseaban por el parque, Lylah se detuvo repentinamente.

Lylah: Azrael, ¿has notado algo extraño últimamente?

Azrael: (se encogió de hombros) No, ¿qué pasa?

Lylah: solo sentí que alguien nos estaba siguiendo, pero creo que es mi imaginación.

Azrael: No te preocupes, estoy aquí para protegerte.

La figura desconocida se acercó un poco más, sin ser vista. Su plan estaba en marcha, pero por ahora, seguiría observando, esperando el momento perfecto para actuar. La oscuridad la rodeaba, y su sonrisa se hizo más amplia. La noche continuó, y Lylah y Azrael regresaron a su rutina normal.

Azrael se durmió esa noche con la mente en blanco, luego de unos minutos se quedó profundamente dormido y empezo a soñar, se encontró en un mundo extraño, lleno de ruinas y muerte. El cielo estaba oscuro y el aire olía a cenizas.

"¿Dónde estoy?", preguntó Azrael, confundido.

No hubo respuesta. Solo el silencio y el viento que susurraba entre las ruinas, Azrael caminó por el paisaje desolado, viendo esqueletos y restos de edificios derrumbados. Buscó a alguien, pero no había nadie, el silencio era opresivo y se sintió solo y abandonado.

"¿Hay alguien aquí?", gritó.

Su voz se perdió en el viento, sin respuesta, continuó caminando, buscando algo, cualquier cosa que le diera una pista sobre dónde estaba y por qué, pero solo encontró más ruinas y más silencio. De repente, escuchó un ruido detrás de él. Se giró, pero no vio nada.

"¿Qué fue eso?", se preguntó.

El ruido se repitió, y Azrael supo que no estaba solo, pero ¿quién o qué estaba allí? Azrael se quedó quieto, esperando a que sucediera algo más y entonces, todo desapareció.

Azrael se encontró de vuelta en su cama, sudando y confundido. ¿Fue solo un sueño? se preguntó pero el recuerdo de las ruinas y el silencio persistían en su mente ¿Qué significaba ese sueño? ¿Era solo su subconsciente o algo más?

Azrael no tenía respuestas, pero sabía que necesitaba entender el significado de ese sueño. Azrael intentó sacudirse la sensación de inquietud que le había dejado el sueño, se levantó de la cama y comenzó su rutina diaria, pero no podía dejar de pensar en las ruinas y el silencio.

Mientras se duchaba, se preguntó si había algo más detrás de ese sueño. ¿Era solo su subconsciente procesando información o había algo más profundo? Se vistió y se dirigió a casa de Lylah para llegar juntos a la universidad, cuando llegó, recordó que ese día ella llegaría más temprano de lo habitual por algunos créditos extras.

Al llegar, Lylah ya estaba allí, sentada en la biblioteca.

Azrael: Hola (dijo sentándose a su lado) .

Lylah: Hola, (respondió Lylah sonriendo) ¿Cómo estás?

Azrael: estoy bien, tuve un sueño raro anoche.

Lylah: ¿Qué pasó en el sueño?

Azrael le contó todo, las ruinas, el silencio, el ruido misterioso mientras Lylah escuchaba atentamente, su expresión cada vez más intrigada.

Lylah: ¿Crees que significa algo?

Azrael: No lo sé. Pero no puedo quitar la sensación extraña.

Lylah: Quizás fue solo un mal sueño, no te preocupes mucho (dijo abrazándolo por la espalda suavemente)

Azrael sonrió, sintiéndose agradecido por su apoyo. Pero mientras estudiaban, Azrael no podía evitar sentir que algo estaba a punto de suceder. Algo que cambiaría todo.

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