Operativo de la comisión de héroes

Capitulo 1: bienvenidos al patio de recreo

" Hijo, no hay nada que pueda hacer excepto disculparme. Si no fuera por mí, tal vez hubieras nacido con un don. Podrías convertirte en el héroe que siempre quisiste ser. En cambio, tú, al igual que yo, no tienes ningún don... Pero, incluso nosotros tenemos un lugar en la sociedad. Aún podemos ayudar a las personas. Si aún deseas hacerlo, entonces muéstrame la determinación. Muéstrame el espíritu. Si sigues mis pasos, entonces... tendrás la oportunidad de ayudar a las personas que te rodean".

Parte I: Un ejecutor

Estado: 0%

Diez meses antes de la UA.

Estación de policía de Musutafu, 20:42 horas.

El oficial superior Inaya suspiró de nuevo con cansancio. Realmente amaba su trabajo, pero ni siquiera entonces sentía mucho entusiasmo por quedarse después de sus horas de trabajo. A pesar de lo mucho que quería volver a casa con su esposa, seguía yendo a la sala de interrogatorios. Tenía que hacerlo. Lleno de determinación, Inaya se recordó a sí mismo que él mismo había elegido este trabajo. Este tipo de cosas pasan en el trabajo policial y no hay nada que puedas hacer al respecto.

Según el informe que leyó en el camino, el caso es realmente interesante. Eraserhead, bastante conocido entre los oficiales locales, atrapó a un justiciero adolescente. En sí mismo, no hay nada interesante en capturar a uno. La policía tiene que atrapar constantemente a héroes imitadores que, por alguna razón, no pudieron ingresar a las escuelas de héroes. Tal es la realidad de un mundo en el que los héroes dominan en los medios. Sin embargo, en este caso, las circunstancias son un poco más inusuales. El justiciero no tiene peculiaridades . Muchos oficiales subalternos olvidan la mayor parte de la teoría, que, como pensaban, no les sería útil en ningún otro lugar que no fuera el examen, y llamar al jefe para cada otro caso es contraproducente.

Es por eso que el oficial superior Inaya se encuentra ahora frente a la puerta de la sala de interrogatorios después de su hora de trabajo.

Suspiró, se ajustó el uniforme para lucir más presentable y entró.

A su izquierda, apoyado en un espejo unidireccional con los brazos cruzados, se encontraba Aizawa Shota, también conocido como Eraserhead. Inaya honestamente no entendía cómo a una persona con tales poderes se le permitía hacer patrullas simples. Si él fuera el jefe de la Asociación de Héroes, definitivamente mantendría a esos héroes más cerca, usándolos solo en casos especiales. Tal vez incluso lo pondría en una lista especial en la Comisión de Héroes. El tipo definitivamente necesita descansar. ¿Y qué sentido tiene borrar quirks con tus propios ojos si apenas puedes mantenerlos abiertos? Asintiendo con la cabeza al oficial superior, Aizawa volvió su atención al justiciero adolescente. Mirándolo, Inaya se sentó en la silla frente al chico. Una mesa los separaba.

Es cierto que, según la descripción que figura en el informe, el joven no parecía tener más de 16 años. Cabello verde, ojos grandes y verdes, pecas, estatura media, cuerpo ágil y musculoso. Para curiosidad de Inaya, parecía bastante tranquilo.

-¿Izuku Midoriya?

El niño asintió.

"Aquí dicen que no tienes ninguna peculiaridad. ¿Es cierto?"

"Sí."

Observando atentamente las emociones en el rostro del niño, Inaya se sorprendió un poco por la falta de reacción del niño sobre su condición de no tener un don. No es ningún secreto que es difícil para las personas sin superpoderes en esta sociedad sobrenatural. El número de suicidios entre las personas sin don es más alto que nunca y, a pesar de la posición del gobierno, la situación real de esas personas es difícil. Señalarle a una persona que no tiene un don es como decirle a una persona que no es una persona completa. Como si fuera inferior. Entonces, ¿por qué exactamente no hay reacción? Y una cosa es que una persona mayor no reaccione a eso. Esas personas crecieron en una época en la que los héroes todavía estaban técnicamente fuera de la ley, y no tener un don no era un "pecado" para algunas personas. Pero cuando un niño, que probablemente ha vivido toda su vida en una sociedad donde los héroes dominan los medios, no reacciona mucho a esto, es bastante extraño.