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Empezaba a oscurecer en el momento en que llegó casa. Lo que empezó como un trago de cerveza y comida rápida en el bar se convirtió en una celebración por su ojo morado, tragos, y un torneo de dardos improvisado entre los cuatro. Pasó un buen momento, pero a medida que el tiempo avanzaba, un poco de melancolía se colaba en su interior. Deseaba que Bible estuviera allí. Le hubiera gustado presentarlo a sus amigos, para que fueran amigos de Bible. Estaba más o menos seguro que les gustaría, era amable, decente con una sencilla personalidad fácil de amar. Era dulce, atento, cariñoso, y era también, como Build estaba cada vez más consciente, un hombre atractivo. 

Build estaba sorprendido por eso. En un primer momento, si tuviera que ser honesto consigo mismo, no lo había clasificado o considerado de esa manera. A primera vista, tal vez era sencillo, el aspecto del hombre promedio que no llama mucho la atención, si no fuera por su tamaño. Pero ahora, Build se encontraba alarmante atraído por su naturaleza tranquila, su punto de vista generoso, y esa algo insegura de su misma sonrisa que retorcía algo en el pecho de Build cada vez que la veía. Nunca había encontrado la falta de confianza atractiva, todavía no lo hacía hasta cierto punto, pero con Bible, Dios, sólo quería consolarlo, besarlo y decirle que no era tonto. Eso no solo, no lo echaba para atrás, sino que tiraba de su corazón y le hacía desear que Bible pudiera ver cuánto tenía para ofrecer... o solía tener. 

Build también estaba empezando a apreciar su tamaño. Era obvio, después de haber vivido con Bible por un corto tiempo, que el hombre era plenamente consciente y tal vez cohibido por su tamaño. Sus hombros tenían tendencia a encorvarse, era naturalmente pausado y tranquilo como si no quisiera asustar a nadie. Pero para Build, lo que antes era intimidante, ahora era tranquilizador. Era reconfortante, de una manera que Build no entendía muy bien pero, ahí estaba esa sensación de seguridad cuando estaba con Bible, independientemente de si podía tocarlo o no. Y si se permitía ahondar en sus deseos más bajos, tendría que admitir ante sí mismo que el tamaño de Bible le atraía. En pocas palabras, le gustaba estar abajo, le gustaba mucho, y la idea de estar sujeto bajo ese peso, que esas grandes pero gentiles manos lo moviesen hacía la posición que debía adoptar, enviaban escalofríos por su espalda. Temblores reales. Bible como un extraño estaba bien a la vista. Bible como su Bible, era el hombre más bello que había conocido, era jodidamente hermoso. 

Build vaciló ante su puerta, llaves en mano. Tenía un problema al que tendría que hacer frente tarde o temprano. Bible, un hombre que estaba completamente fuera de su alcance, se estaba convirtiendo, rápidamente, no sólo en una sólida parte de su vida, sino que también estaba consiguiendo que Build, lo quisiera de una manera que no le estaba haciendo ningún favor. Estaba provocando que Build quisiera decir cosas que no debía decir, y le gustase o no, estaba involucrado emocionalmente. Ese barco había elevado el ancla y partido hacía mucho tiempo. La necesidad de acurrucarse junto a él, para abrazarlo y darle un beso de buenas noches, era fuerte y se sentía tan natural como respirar, pero no importaba lo mucho que quisiera esas cosas, no eran y nunca serían posibles. 

Durante la semana pasada, Build no se había corrido en su mano. Intentó masturbarse un par de veces, pero era demasiado incómodo saber que Bible estaba presente en algún lugar del apartamento y tenía miedo de hacerlo. No era que pensara que Bible iba a espiarlo, o escucharlo, de hecho Bible mantenía una respetable distancia de Build cuando el fantasma lo consideraba oportuno. Esto incluía una regla tácita en la que, su dormitorio, era zona prohibida para Bible. Pero a pesar de eso, Build no había tenido el valor de masturbarse, y se debía en parte a que sabía en quién estaría pensando mientras lo hacía. 

Apoyó la frente contra la puerta por un momento, con los ojos cerrados. Había una forma de solucionarlo. Bible no sentía nada cuando Build se iba. El tiempo no existía sin su presencia y para Bible transcurría una fracción de segundo entre que Build salía y regresaba de nuevo, incluso aunque estuviese ausente durante horas. Así que en teoría, Build podía ir a cualquier parte, hacer cualquier cosa, y Bible no tendría que saberlo. Ta le había dicho que echara un polvo... 

Despegó la cabeza de la puerta con una rabieta, jugueteando con las llaves. Solo pensar en escabullirse para tener sexo, lo hizo sentirse culpable y a la vez muy enfadado. Nunca habría nada entre él y Bible, no podría haber nada más aparte de una muy singular y especial amistad que le estaba saliendo muy cara a su corazón. No le debía nada a Bible, pero la idea de ver a otras personas no se sentía del todo bien para él, y la idea de que Bible fuese consciente de ello, tener que vivir con ello, de alguna manera, lo llenaba de tristeza. Sabía cómo Bible se sentía respecto a él. 

Build sacudió la cabeza, y metió la llave en la cerradura. — Esto se está poniendo muy complicado —murmuró, y luego entró. 

Cerró la puerta detrás de él, y se volvió para ver a Bible de pie justo donde lo había dejado. Una cálida sonrisa tocaba los labios del fantasma. 

—Hola —saludó a Bible en voz baja. 

Build supo en ese momento que siempre querría ver esa sonrisa. La amistad entre ellos era mucho más que extraña, pero también era la más inesperada, y la más maravillosamente natural de las conexiones que había tenido con otra persona. Era un ancla para todo lo bueno que ni siquiera sabía que se estaba perdiendo. 

Se sentía bien, y sería un hombre feliz si pudiera hacer de Bible la única constante en su vida, si pudiese ser recibido en casa por esta persona para siempre. Ningún otro podría hacerlo ahora o su corazón se rompería, sólo había hecho falta una semana para que amase a una persona que nunca podría tener. 

—Bible —suspiró—. Te extrañé. 

El Fantsma En Mi Sofa (Adaptada) (Por Becha) (BIBLEBUILD)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora