Día 2

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Hola, chico del mostrador
Hoy volví a ir a la tienda del centro comercial, tome un montón de ropa y la metí en el probador, ya en el probador me dedique a leer un libro del cual estoy enamorada en lugar de probarme la ropa. Al pasar 20 minutos tome 2 blusas del montón de ropa y me las probé; eran lindas, salí y le entregue la pila de ropa a una encargada y pase a pagar esas 2 blusas que me habían gustado. 1 era estampado de flores y fondo azul fuerte, en la parte trasera la tela era más delgada casi transparente pero del mismo tono azul y unía los dos tipos de telas con un moño azul en la espalda; la otra era una camisa blanca que tenía corazones negros y cuello en forma de corazón en tono negro.
Al llegar a la caja me saludaste con tu peculiar saludo y una sonrisa encantadora ¿te habían dicho que tu sonrisa es perfecta? Porque lo es, la sentía tan cálida, era como si las personas que nos rodeaban se hubieran esfumado dejándonos a nosotros 2 solos y lo único que nos separará fuera un mostrador. Me entregaste mis blusas en una bolsa negra con el nombre de la tienda en letras blancas y me dijiste <<hasta luego>>
Tu voz era como música para mis oídos espero escucharla mas seguido.
Atte: la de las 2 blusas

Mi chico del mostradorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora