Pasados los tres días del Año Nuevo, como Huo Jinyu no dejaba de pensar en iniciar el quien está cerca del agua será el primero en ver la luna* de esta trama, en el cuarto día del año llevó a Jiang Qingzhou al apartamento 702 de enfrente. (Significa aprovecharse de la cercanía para obtener beneficios)
En ese momento, el 702 estaba vacío, solo quedaba la estructura desnuda, completamente vacío como si fuera una casa sin terminar.
Jiang Qingzhou dio una vuelta, realmente impresionado con la capacidad de acción de este joven amo; ¿en tan pocos días? No solo consiguió el apartamento, sino que también había vaciado todos los muebles, grandes y pequeños.
“Observa, ¿cómo quieres decorar esta casa?”
Jiang Qingzhou levantó la cabeza de golpe, con una expresión de sorpresa, señalándose a sí mismo: “¿Yo?”
¿Era lo que estaba pensando?
“Claro,” respondió Huo Jinyu con toda seriedad. “Esta casa, como mucho, la ocuparé un año. El próximo año, cuando logre el alcanzar el fruto maduro (lograr el objetivo deseado), seguramente ya no viviré aquí. Además, esta casa está a tu nombre; si vamos a decorarla, debería ser a tu gusto, no al mío, ¿verdad?”
“Como un simple huésped temporal, tengo muy claro mi posición.”
Jiang Qingzhou: “…” ¿Huésped? ¿Temporal? ¿Cómo es que Huo Jinyu lograba decir estas cosas tan descaradamente?
Definitivamente hay una barrera mental entre él y Huo Jinyu.
¡Que haga lo que quiera!
Realmente, una vez más se quedó asombrado. Hay gente que presta dinero, pero nadie tan exagerado como Huo Jinyu; él pensaba que si administraba bien el supermercado, en unos diez años podría devolverle lo que le debía a Huo Jinyu.
Pero nunca imaginó que afuera siempre hay alguien mejor; mientras él aquí se esforzaba por ganar dinero para pagar el préstamo, Huo Jinyu parecía ser como un río desbordado, inventando formas de aumentar su deuda constantemente.
Al ver que el “monto del préstamo” crecía como una bola de nieve, cada vez más grande, Jiang Qingzhou al volverse a calcular, descubrió que el dinero que Huo Jinyu había gastado en él ya alcanzaba casi la mitad de nueve cifras.
Lo clave es que apenas ha pasado medio semestre.
Aún quedan tres años y medio de universidad, y Jiang Qingzhou no se atreve a imaginar que, al ritmo aterrador con el que Huo Jinyu sigue "aumentando el préstamo", cuando se gradúe, en lugar de un nuevo trabajo, se encontrará con una deuda astronómica.
Solo de pensar en ese número vago y asfixiante...
Jiang Qingzhou se dejó caer contra la pared blanca a su lado. “Déjate llevar, ya no importa”.
Una meta pequeña puede que sea alcanzable si te esfuerzas, pero una pequeña (gran) meta de mil millones... mejor ni intentarlo y ve a dormir.
La noche del Año Nuevo Lunar, él ya había tachado silenciosamente de su vida cualquier plan de casarse y tener hijos. ❲Aplica la de mi erudito, si no puedes pagar la deuda solo cásate con el prestamista. Pero solo aplica si el prestamista es bueno.❳
¿Para qué preguntar? Como alguien lleno de deudas, mejor no ir por ahí perjudicando a buenas chicas.
Huo Jinyu no tenía ni idea de los pensamientos de Jiang Qingzhou. Si los supiera, seguramente se sentiría secretamente satisfecho, alegrándose de que sus bombas de caramelo recubierto/dulces trampas hayan funcionado.
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El villano solo ama al conejito que crío
RandomEn cada novela antigua de contraataque popular, siempre hay un villano masculino vicioso al que no le gusta el protagonista masculino de base. A menudo son guapos, de buena familia y siguen siendo una segunda generación rica, pero solo quieren tener...