01

235 40 20
                                        

Hola :D

No tengo mucho que decir aquí la verdad, solo que como ya se nota este fanfic toca temas sensibles

Todo con el debido respeto claro está

Stan era muchas cosas, una de esas era alguien que no se rendía si tenía un objetivo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Stan era muchas cosas, una de esas era alguien que no se rendía si tenía un objetivo

Logró colarse hasta la habitación que deseaba llegar, no sin antes hacerle algunos favores a otras personas

Se sabía que él conseguía cigarros así que algunos le hacían favores a cambio de uno, o si eran caprichosos a cambio de una caja

Se paralizó cuando estuve enfrente de una puerta blanca, una habitación que siempre había pasado desapercibida para él hasta este momento

Incluso con una persona que recién acababa de descubrir, resoplo se sentía ansioso, a la vez con miedo por no sabía si todo saldría como quería

Su mano ya se estaba moviendo tocando la puerta, dos pequeños golpes esperando respuesta

— ¿¡Que quieres?! — Se escucho un grito detrás de la blanca puerta

No le respondió, se limitó a dar otro golpe a la puerta

Se escucharon pasos fuertes, estaba muy enojado aquel muchacho, abrió la puerta por fuerza

Su ceño dejó de estar fruncido cuando vio al castaño, se quedó analizando sus detalles como su corte mullet, sus ojeras y ropa desgastada

No se esperaba para nada encontrarse con ese chico

— ¿Que? — Dijo legítimamente confundido

Stan soltó un suspiro intentando no mirar mucho al más delgado, su mirada bajo hasta una de las manos ajenas

La cual tenía una llave en una la mano, ahora eso podía explicar porque podía salir cuando se le diera la gana, el tipo se había robado un par de llaves

De nuevo subio su mirada teniendo un escalofrío en cuanto se topo con los ojos azules claros

— Necesito un favor tuyo chico celeste — Explicó cruzandose de brazos

Fiddleford no tuvo que pensar mucho para entender que le había apodado así por el color de sus ojos, alzó una ceja ¿quien se creía ese tipo?, no podía llamarlo así solo porque si

— Perdona pero... ¿Que carajo?, no te tomes confianzas, ¿quien te dijo que yo te podria ayudar?, no veo que tengas nada útil que yo quiera — Sus palabras eran frías

Bien calculadas, alguien que sabía bien defenderse y no ser tomado como tonto

Stan sintió admiración por esa actitud, pocas personas sabían protegersen sin tener que amenazar

— Bueno nadie me lo dijo... Solo lo supuse, veo que tienes llaves para tu cuarto y el de otros, creo que eres bastante listo —

Las mejillas ajenas tuvieron un ligero rosa, no sabía diferenciar si era por que estaba apenado o porque no sabía recibir halagos

Aun así el de mullet no pudo evitar sonreír tras ver eso

— Yo... ¿Que vas a ofrecerme a cambio? —

— ¿Fumas? —

El ojiclaro soltó una risa, casi como si se burlara del contrario

— No vas a ganarme con cigarrillos, ¿que más tienes? — Insistió se notaba que quería algo más potente o más útil

El castaño se tenso, su rostro se puso rojo de la vergüenza, no tenía nada más que ofrecer

Fiddleford chasqueo con la lengua esbozando una sonrisita

— Ow no tienes nada, escucha... no me desagradas, así que podemos hacer un trato —

Stanley estaba desesperado así que asintió con la cabeza, esperándose cualquier pedido, cualquier cosa que no tuvieran permitida entrar

O incluso cualquier cosa cuestionables, no sabía que esperarse de ese cara bonita

— Mira simplemente te pido vendajes a cambio, traeme una caja entera y te ayudó en lo que desees —

El castaño se sintió aliviado y confundido, ¿vendajes?, eso era bastante sencillo

— ¿Solo eso? — Pregunto creyendo que era alguna broma

— Si, no soy un criminal solo necesito cosas útiles — Alzó los hombros

— Bien es un trato ah... — Olvido por completo su nombre

— Fiddleford — Completó con su nombre

Stan sonrió ampliamente

— Un gusto hace negocios contigo —

— No diré lo mismo hasta que me traigas lo que dije Stanley pines —

Esta bien, fue extraño escuchar que lo llamara hasta con su apellido, quería decir algo más porque sentia curiosidad por ese chico

Se veía más decente que el resto, incluso su petición era bastante normal, otro tipo hubiera pedido drogas o pornografía, o cualquier cosa de ese estilo

Quería hablarle pero tendría que esperarse cuando la puerta fue cerrada en toda su cara

— Vuelve cuando tengas todo —

Haría caso a eso, aunque con miles de dudas en la cabeza

CIGARRILLOS [Fiddlestan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora