Capitulo 1

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Lihan regresó a la casa que compartía con sus hermanas, Ashe y Rei. La casa estaba en silencio, un lugar de calidez y familiaridad. Era modesta pero acogedora, con pequeños detalles que la hacían única: estantes llenos de libros sobre tierras lejanas, algunos recuerdos de aventuras pasadas y el equipo de entrenamiento de Ashe en un rincón. Lihan sonrió con nostalgia, sintiendo un leve anhelo por sus hermanas, pero se forzó a apartar esos pensamientos. Había elegido este camino, y no iba a echarse atrás.

Rápidamente, comenzó a reunir lo necesario para el viaje. Revisó su mochila: comida seca, pociones, una brújula y un mapa. Su espada colgaba a su lado, el mango desgastado y familiar en su mano. Colgándose la mochila al hombro, echó un último vistazo a la casa. "Volveré pronto," murmuró, más para sí mismo que para nadie más, aunque sentía que sus hermanas, de alguna forma, lo escuchaban. Cerró la puerta y dio el primer paso hacia la misión que le aguardaba.

Los primeros días de viaje transcurrieron en calma. Lihan absorbía el paisaje a su alrededor: el susurro de los árboles, los llamados lejanos de los pájaros y las colinas extendiéndose hacia el horizonte. La paz era casi hipnótica. Permitió que su mente se relajara, disfrutando de la sencillez de cada paso.

Lihan miro hacia el cielo sintiendo su corazón latir con fuerza. "Así que esto es lo que se siente, ¿eh? Aventurarse solo a una misión que podría ser peligrosa..." Sonrió para sí mismo, aunque el sonido se perdía en el aire abierto. "Me pregunto qué diría Ashe si me viera ahora. Probablemente se enojará conmigo por hacer algo imprudente, pero sabiendo lo blanda que es ella no tardaría perdonarme rápidamente."

Luego llego la noche, haciendo que Lihan suspirara. Cada noche, encontraba un lugar adecuado para acampar, siempre cerca de un arroyo o bajo un denso dosel de árboles para cubrirse. La segunda noche cazó un ciervo, disfrutando del calor del fuego y la satisfacción de preparar su comida bajo las estrellas. "Nada mal, Lihan," murmuró, recostándose cerca de su mochila, apoyando su cabeza en una almohada improvisada y mirando hacia el cielo. "Quizás sí estoy aprendiendo a hacer esto de aventurarme solo."

Los días se transformaron en una semana mientras se adentraba en los caminos menos frecuentados, hasta que finalmente llegó a las afueras de la Montaña Sombría. El cielo se volvió más oscuro a medida que la montaña se alzaba imponente frente a él, proyectando una larga sombra sobre el valle. Notó un cartel desgastado junto al camino, con letras apenas legibles: "Advertencia: Solo aventureros de rango S y superior pueden proceder."

Sintió que algo se le revolvía en el estómago mientras leía la advertencia. Historias de los peligros de la Montaña Sombría resonaron en su mente, rumores de criaturas poderosas y magia oscura acechando en sus profundidades. Aventureros de rango S habían perdido la vida allí, y él, siendo de rango B, estaba muy cerca de lugar peligro y desconocido que iban más allá de su rango. Así que decidió rodear la base de la montaña. "No estoy aquí para probar nada," dijo en voz alta, como si sus propias palabras pudieran darle fuerzas. "Solo estoy aquí para ayudar a Solvanta... nada más."

Sin embargo, mientras avanzaba por el bosque espeso que rodeaba la montaña, una sombra comenzó a moverse entre los árboles: una criatura masiva con ojos que brillaban de un rojo siniestro. Lihan se quedó inmóvil, llevando su mano a la espada por reflejo. La criatura soltó un gruñido bajo y amenazante, su mirada fija en él. No necesitaba saber el rango de la criatura; su instinto le decía todo. Ese monstruo estaba más allá de sus capacidades.

"Bien, Lihan... corre. Ahora." Salió disparado, el corazón latiendo con fuerza, cada fibra de su ser gritándole que corriera más rápido. Detrás de él, la criatura lo seguía, destrozando árboles a su paso. Lihan esquivaba y serpenteaba, apenas manteniéndose a salvo mientras las ramas se rompían y el suelo temblaba bajo el peso de la bestia. Sintió cómo se acumulaba energía oscura detrás de él y se lanzó a un lado justo cuando un rayo de magia sombría destrozó el lugar donde había estado. "Demasiado cerca..." jadeó, incorporándose y volviendo a correr.

Rompiendo la maldición futura (Bad ending party - Anti-NTR)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora