Capitulo 6

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El silencio al otro lado de la línea se prolongó tanto que Jungkook empezó a sentir un nudo en el estómago. 

Tae... olvida lo que dije —murmuró, su voz temblorosa. 

Taehyung suspiró, con esa calma que siempre lo hacía parecer inquebrantable. Pero esta vez, había un matiz de duda que Jungkook pudo percibir. 

No... Solo... no entiendo, pero quiero. 

No lo pienses mucho. —Jungkook tragó saliva—. Yo... los quiero a los dos, y sabes que nunca te haré menos por ella. Te amo mucho, Tae, eres mi mejor amigo. 

Taehyung apretó los labios. La palabra *amigo* se sintió como un golpe en el pecho. Pero no iba a detenerse ahora, no cuando finalmente tenía lo que siempre había querido. 

Yo también te amo mucho... —dijo, con un peso en la voz que Jungkook no alcanzó a notar. 

Taehyung sabía que nada bueno saldría de esto, pero no le importaba. Siempre había sido un desgraciado por querer más de lo que debía, y ahora iba a aprovechar esa puerta abierta. 

—¿Cómo lo hacemos? —preguntó Jungkook, la inseguridad evidente en su tono. 

Será como antes —respondió Taehyung, tomándose su tiempo—. Pero ahora... ahora dejarás de fingir que no lo disfrutas. Ahora me besarás, y cuando estemos solos, haré lo que quiera contigo. Pero, obviamente, nadie puede enterarse. 

Jungkook se mordió el labio, nervioso pero incapaz de resistirse. 

—¿Te gustó? 

—¿De qué hablas? —Taehyung sonrió, aunque Jungkook no podía verlo. 

De lo que hicimos. ¿Te gustó? 

El tono ansioso de Jungkook lo hizo sentir poderoso. 

Me encantó, Kook. Y lo haría mil veces más. 

Jungkook exhaló, como si hubiese estado conteniendo el aire. 

Yo también quiero. Quiero pasar más noches contigo, Tae. Quiero que me toques más, que me hagas... sentir de esa forma otra vez. Ese día no estaba fingiendo. Siempre he querido. 

El corazón de Taehyung dio un vuelco. Era más de lo que había esperado escuchar, pero aún así se aferró a su fachada indiferente. 

—¿Por qué no me lo dijiste antes? 

Tenía miedo de que no quisieras... —Jungkook hizo una pausa, como si estuviera buscando las palabras adecuadas—. No somos gays, Tae. Solo es algo físico... algo que no significa nada, ¿verdad? 

Taehyung apretó los dientes. Quiso gritarle que no era solo físico para él, que había estado enamorado de Jungkook durante años. Pero no lo hizo. 

No, claro que no significa nada, Kook. 

Por dentro, se sintió como un mentiroso. 

Me gustó que fueras rudo conmigo —dijo Jungkook, un leve temblor en su voz que Taehyung captó de inmediato. 

El moreno sonrió, su lado dominante despertando con fuerza. 

—¿Sí? A mí me encantó verte así... completamente mío. Ojalá se repita pronto. 

Jungkook tragó saliva, las palabras saliendo de su boca antes de que pudiera detenerlas. 

Mañana... después de clases, hyung. Quiero que me hagas tuyo otra vez. En los baños de la universidad. 

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