Friends (Rorasa)

2

Asa se encontraba un poco triste.
Estos últimos tres días ha estado rondando cierto rumor por el instituto, un rumor que decía que su novio Niki estaba engañándola. Asa no creía nada, pues antes de creer a un grupo de gente que no sabe nada sobre su relación, le creeria a él. Su novio le había jurado y per jurado que era mentira, que solo la queria a ella y la castaña obviamente le creyó.

En cambio, su amiga Dain no le creía nada. Para ella Niki siempre ha sido el típico chico que va detrás de todas las mujeres que son guapas o están buenas, primero lo hizo con Jiwon, después con Sarah y ahora con Asa, solo que con ésta última lo consiguió. La japonesa sabía esto pero no le dio importancia ya que según ella, Niki la amaba. Ya, claro. A Dain le ponía de mala hostia la situación porque ella sabía que había posibilidades de que Niki le pusiera los cuernos a su amiga, es más, ya podía haber ocurrido. Que una persona tuviera el amor de Asa, siendo tan afortunado, y que le hiciera eso... a Dain le daban ganas de matarlo.

La coreana necesitaba ser ella la que la besara, la que la llevara al cine y la invitara a cenar. Necesitaba ser ella esa persona y no el imbécil de Niki. Y aunque lo odiara, muy a su pesar, seguía siendo el novio de su amiga, y hasta el momento por muchos rumores que haya, no se habia confirmado nada. Por ahora.

Las dos amigas salieron juntas del instituto. Asa le dijo a Dsin si quería comer en su casa y ésta aceptó.
Dain sabía que Asa la había invitado porque se encontraba un poco triste y necesitaba distracción, aun asi quiso ir y darle el amor que necesitaba.

-Tu... ¿tu crees que es verdad? -preguntó Asa mirando al suelo mientras caminaba.

-¿El qué? -Dain intentó hacerse un poco la loca, no le apetecía tener esa conversación.

-Lo de que Niki... ya sabes -dió una patada a una piedra- que me está engañando.

-Oh, eso... No, o sea no creo -respondió Dain un poco cortante. Ella sabía que su respuesta era mentira pero no iba a decirle que sí, odiaba a Niki pero no quería ver a Asa más triste aún.

-¿Crees?

-¿Cómo?-la morena se giró a mirar a Asa. No se había dado cuenta de que detrás de ese "no", había ido un "creo".
Una cagada de su parte.

-Has dicho que crees. ¿Qué te hace dudar? ¿sabes algo? -Asa comenzaba a estar nerviosa.

-No, no sé nada Asa. Ha sido una forma de hablar sin más, tranquila. -dijo Dain tranquilizándola mientras la abrazaba de lado por los hombros.

-Ya... Tienes razón. Tengo que calmarme. -respondió la castaña, acto seguido pasó sus manos por el rostro-. Es sólo que me da inseguridad. Él me ha dicho que no, pero ya no sé que pensar.

-Mira, -Dain dejó de andar y se giró para mirar a su amiga, que también frenó y la miró- yo no sé si Niki te ha puesto los cuernos o no, solo sé que tú eres increible, tanto por dentro como por fuera. Y si ese idiota realmente lo ha hecho, no tiene ni idea de lo que se pierde, ¿vale?

Dain, muy delicadamente, le acarició la mejilla a Asa. Sus rostros se acercaron lo suficiente como para quedar a centímetros, pero esto no era nada raro entre ellas ya que su relación siempre fue así. Necesitaban estar piel con piel y ellas eran conscientes de eso.

Asa subió su mano hacia la de Dain, que se encontraba en su mejilla, para así devolverle la caricia. Asa, con una sonrisa, giró un poco el rostro y le dio un pequeño beso a su amiga en la mano haciendo que Dain también sonriera. Se quedaron mirando un par de segundos, que para Dain fueron horas.

-Vamos a casa, me apetece pasar tiempo contigo y sólo contigo -le dijo Asa, bajando su mano y entrelazando los dedos con los de Dain.

-Vamos. -le sonrió, y ambas adolescentes se marcharon.