¿Para qué me sirve, dice Jehová, la multitud de vuestros sacrificios? Hastiado estoy de holocaustos de carneros y de sebo de animales gordos; no quiero sangre de bueyes, ni de ovejas, ni de machos cabríos. No me traigáis más vana ofrenda; el incienso me es abominación; el convocar asambleas, no lo puedo sufrir; Vuestras lunas nuevas y vuestras fiestas solemnes las tiene aborrecidas mi alma; me son gravosas; cansado estoy de soportarlas.Isaías 1

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Relatos Espirituales
SpiritualUna colección de relatos que busca llevar al lector a una reflexión de la vida cristiana.