Pasaron los días y mi mala reputación estaba ganando fama en todo el mundo.
Los miembros de la nobleza me odiaban y los ciudadanos me tenían miedo, y a pesar de ser víctima de la soledad, no era algo tan malo, después de todo, la gente no dejó de hablarme y solo me creían mala persona, así que no me quejaba y disfruté de esta reputación tan buena que me hice.
Y así eran los días, hacer el trabajo, irse al bosque o a mi habitación para escribir un poco y relajarme hasta dormir, creí no necesitar nada más, hasta que él llegó, los miembros querían hacer una alianza con el país vecino y no me podía negar porque debía hacer lo mejor para el país, por lo que me dirigí allí para hablar con ellos y no me imaginaba que mi visión de la vida cambiaría por completo en ese día. Como mi reputación era conocida por todo el mundo, sí que todos me tenían miedo, felizmente, lo utilicé a mi favor, para acabar con esto rápidamente y ser yo quien dirigiera la discusión, pero no me recibió el monarca del país, sino el marqués. Se presentó como Luxio y parecía que él no creía en mi mala imagen, así que pensé en hacer todo lo posible para demostrarle que debía tener cuidado conmigo.
Conversamos amablemente sobre la alianza y creí que se acabaría rápido, pero no fue hasta que firme el pacto y todo cambió, "Qué hermosa letra", me dijo asombrado y me sorprendí mucho, porque nadie me había dicho eso, salvo mi padre y avergonzada le agradecí el cumplido, me preguntó en dónde había aprendido a escribir tan bien y le respondí que, de hobby, escribía mucho así que mi letra fue mejorando con el tiempo, él se asombró mucho y me preguntó si podía ver mis obras; asustada me negué, ya que todo eso era privado.
Él lo aceptó, pero me dijo que la próxima vez que escribiera, se lo dijera para ir a verlo por él mismo, me sorprendí mucho nuevamente por su petición, pero acepté.
Después de regresar, me fui a dormir y al día siguiente, me había ido al bosque para escribir, pero que recordé el acuerdo y dudando un poco, decidí cumplirlo. Me pregunté, que podría escribir para no decir algo privado y recordé que mi cumpleaños era el siguiente mes, así que escribí al respecto, en pequeñas frases y oraciones. Llamé al marqués y él vino apresuradamente. Al llegar, me preguntó si podía verla, lo acepté y lo dirigí a mi cuarto.
No me sentía bien al mostrar mi escritura en un lugar donde todos pudieran verla, pero al estar solos en mi habitación, se la mostré.
Se impresionó mucho y me dijo que era el poema más hermoso que alguna vez haya leído. Me sorprendí mucho y al regresarme el papel, me di cuenta de que era verdad, había escrito un poema y nunca escribí uno alguna vez, porque lo que más hacía, era escribir lo que sea que tuviera en la mente y al final dijo que me visitaría más seguido para ver mis obras y se retiró después. Me sentí bien al ver que alguien, que no sea mi padre, ame tanto algo mío, pensé que era un buen amigo y me alegraba de haberlo conocido. Entonces, decidí seguir escribiendo como antes lo hacía, para ver si le gustaba y le encantaban.
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La mala duquesa
Historical FictionEn este libro, se relata la vida de Bridget, una duquesa que rige su país, creando su propia reputación, regla y "vida perfecta" en el progreso.