El árbol del destino: ecos de la libertad.

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¿Vendrás? ¿Vendrás al árbol? Donde te dije que huyas para poder ser libre.

A Louis Tomlinson no le gustaban los humanos, exclusivamente los niños humanos. Eran ruidosos, sucios y sobre todo llorones.

En especial el pequeño bebé de su madre, se llamaba Harry. Al inicio de sus años de vida, no hacia mucho mas que soltar pequeños lloriqueos y risas burbujeantes sin embargo esos años de tranquilidad se fueron extinguiendo cuando el pequeño niño aprendió a usar sus pequeñas piernas regordetas.

Y después comenzó a crecer más y más, no era tan mayor como Louis o Demian, pero, si lo suficiente para estar pegado como un pequeño insecto fastidioso en sus hermanos, sobre todo con Louis, tenía una pequeña fascinación o incluso obsesión.

No se le puede culpar. Louis era el futuro rey, y para el pequeño Harry era el ser más interesante que podría residir en el castillo real, no tan fascinante como su mami, pero se podría entender.

Louis caminaba lentamente con su túnica azul celeste pavoneándose entre los pasillos, su mano cubría el mango de su espada, totalmente diseñada por un herrero real.

Sus pasos eran firmes y finalmente llegaron a la arena. Louis era un luminaris con poder de guerrero, todos los luminaris eran mágicos, sin embargo, todos tenían dones diferentes. Pero los lideres de todo clan tenía el don mágico de un guerrero.

Louis se quitó su túnica cuando vio una mata de rizos escondiéndose detrás de uno de los bloques de escudo. Sus rizos largos eran evidentes detrás de aquel objeto.

Con una sonrisa juguetona surgiendo en sus labios, empuño su espada y la dirigió en donde el niño se escondía, llevándose entre ellos unos rizos y el grito agudo de su pequeño hermanito.

—¿Sabes, la siguiente vez puede ser tu garganta? — Louis musito, mirando al niño que salía lentamente del escondite, su nariz estaba totalmente enrojecida por el viento que se colaba durante la época invernal de luminaris, sus ojos verdes asombrado y asustado miraban a su Louis.

—Jamás me lastimarías Louis, tu eres el mejor guerrero—, musito el niño y comenzó a rodear a su hermano mayor, —Mami dice que algún día podre ser un guerrero como tú.

—No puedes ser un guerrero rizado. Es algo con lo que nacemos, todos tenemos una misión asignada, por ejemplo, Demian fue concedido con el don de la paciencia y la medicina. Padre es el dueño de todo, un guerrero porque su destino es cuidar a la familia, al pueblo ¿cierto? Al pueblo a nuestro clan.

—Entonces, yo que soy. No tengo ningún don especial.

Louis acerco su mano hacia la pequeña de Harry, —Eres diferente, eso te hace especial. Entiendes cosas que nosotros no, eres amable y te preocupas por todos y, piensas con el corazón—, comenzando a caminar por la arena— Eres muy inteligente para tu edad, probablemente tu don sea no tener uno ¿lo has pensado?

—Louis eso no me parece algo muy listo, lo cual es totalmente extraño porque eres alguien sabio, tu todo lo conoces. Serás el padre de todo.

—No lo soy, faltan miles de años para tener la sabiduría de un padre del todo.

—Oh, cuando seas el padre de todo, tengo una idea—, el niño se detuvo frente a su hermano adoptivo, —Puedes admitirme como el nuevo don, el don de la nada.

—Oh, eso suena idea fantástica niño, pero para eso faltan muchísimo tiempo.

El tiempo paso demasiado rápido, entre pequeñas peleas inofensivas. Y cuando Louis comenzó a buscar el niño lo observo intentando saltar entre dos ramas de un árbol, sus manos se sujetaban fuertemente del tronco.

—¿Qué estás haciendo Harry? — Louis pregunto mirando como el niño lograba llegar al final de la rama, solo unos metros de distancia del suelo.

—Solo jugando—, el niño se colgó como si de un pequeño simio se tratase.

—Ahora no es momento de juegos, el sol se ha escondido y he terminado de entrenar. Debemos regresar a casa para la cena.

Louis, que había dejado su arma estaba justo a tiempo cuando el niño cayo y pudo sostenerlo antes de que cayera.

—Lo siento— dijo, con sus manos rodeando el cuello de Louis— Algún día será lo suficiente mayor para escalar el árbol sin ningún tipo de problemas.

—Algún día, pero en este momento solo eres un niño imprudente, pudiste haber caído del árbol ¿Qué le diría a la reina sobre ti? ¿Dónde te escondería?

—Algún día he dicho— Harry, susurró cuando comenzaron a caminar hacia las puertas del castillo real. Sus cuerpos estaban bañados en tierra y sudor, cuando se encontraron cara a cara con la familia.

Thalor los miro con desprecio y decepción. —Es tarde, la cena ha comenzado y un rey nunca llega tarde a ningún lugar.

Louis se puso frente al niño. —Lo siento padre, he perdido la noción del tiempo y no me percate de la hora.

—Eres un rey, eres el futuro líder de todo un clan no puedes simplemente excusarte de no prestar atención al horario, en su lugar estar jugando con la mascota de tu madre.

—No es una mascota, es un niño y tiene nombre.

—Ay, que dulzura. Alguien se ha encariñado de la mascota de la reina—, fue la hostigosa voz de Demian la que se escuchó.

—No le vuelvas a decir así— Louis gruño con molestia en dirección de su hermano. Y después miro a su padre, —he dicho que lo lamento señor, pero iremos asearnos y podemos retomar la cena.

—No, la cena ha finalizado, vete a tu alcoba y reflexiona sobre tu posición.

Y con eso finalmente Thalor se dio la vuelta molesto. Y fue esa misma noche, en la que la reina y el rey discutieron haciendo temblar el castillo.

—¿Están molestos por mí? ¿no debemos ser hermano Lou?

—No, Hazz. Yo he molestado a padre, pero no debes preocuparte por eso, mejor ve a tu alcoba, mira esos ojos verdes están cerrándose.

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Es un humano— Thalor gritó en dirección de su esposa, — No es su hermano, no deberían estar juntos ni mucho menos jugando con si fueran unos barbaros. Louis es mi heredero, no el niñero de esa cosa.

—No es una cosa, es mi hijo. Es su hermano, y es completamente natural que se diviertan, son jóvenes. Louis es demasiado joven para que lo lances a esas bestias.

Y fue al día siguiente cuando la decisión fue tomada, Louis partiría al pueblo de lainan, el oeste de luminaris donde seria educado por los maestros para convertirse en el rey indicado. 


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Datos importantes: 

Louis tiene 22 años edad humana y Harry 8 años por lo cual no existen ningún vínculo amoroso, tampoco lo ve como un hermano tal cual, esta consiente que es un humano nacido de otra raza por así decirlo. Lo aclaro para que no haya malas interpretaciones.  

LUMINARIS! LT/HBDonde viven las historias. Descúbrelo ahora