Capitulo 2

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Karen se encontraba ya acostada en su cama cuando el rey apareció por la puerta, las ojeras bajo sus ojos transmitían un mensaje muy claro. Karen levanto la vista de su celular quitándose los lentes de descanso cuando notó a su esposo, exhausto, intentando prepararse para dormir.

Los años habían pasado rápido para la familia real. Desde que William padre había asumido a su puesto como rey, los Payne habían sufrido un giro de vida muy importante. Sus hijos habían dejado la pubertad y su niñez atrás para comenzar el camino de la adolescencia para cuando a Will lo nombraron Rey de Inglaterra. Habían estado esperándolo hacia un tiempo ya que el abuelo William había empeorado de su enfermedad y había creído oportuno el momento para ceder el poder a su único hijo varón. William hijo y Liam eran muy jóvenes cuando se mudaron al Palacio oficialmente, aunque su sangre real siempre había estado ahí. Will estuvo encantado y como hijo mayor abocó su tiempo en hacer todo lo que su padre hacía, se habían vuelto muy unidos con el paso de los años y habían creado un lazo hermoso. Por supuesto en este proceso Will tuvo que dejar atrás su vida como la conocía, no mas juegos ni distracciones pero el siempre lo había soñado así, el siempre había soñado con ser Rey. Liam, en cambio, era muy diferente a su hermano. Este solo pensaba en cuanto lo incomodaba su situación. El siempre intentaba alejarse de todo eso, el quería amigos normales en donde pudieran hacer las cosas normales que cualquier chico de su edad haría. ¿Que sería de su vida siendo príncipe? El no quería serlo. No quería cargar con algo que el no había elegido. La gente era tan falsa, ni siquiera se preguntaban por ellos, solo tenían una extrema obsesión por el poder y el dinero, es más, en su opinión que la realeza actual existiera, era una locura. Había pasado hacía siglos, el mundo había cambiado, se había modernizado y ellos seguían ahí conviviendo entre lujos. Un joven Liam de 16 años pensó que lo peor que le podría haber pasado era mudarse al palacio real y que su padre se convirtiera en Rey. Cuando las cosas cambiaron a partir del ascenso de su padre el solo pudo encerrarse en si mismo y pretender que nada le importaba, que todo era algo momentáneo y cuanto más pudiera distraerse de la realidad que tenia que afrontar, mejor era. El no siempre había sido igual, antes, solía ser un chiquillo muy alegre que le encantaba jugar con sus amigos en el pasto y simplemente observar la naturaleza por ahí. El no necesitaba un palacio para ser feliz, él solo quería a su familia de vuelta. Liam había cambiado mucho y todos lo notaban. William, su padre, dejó de esperanzarse en el y al tener tantas obligaciones también perdió un poco el contacto. Su madre, quien de la familia era la persona con la que mejor se llevaba, sufría por verlo así y siempre intentaba reconfortarlo. Ella creía que Liam solo tenia que encontrar una manera para llevar todo en su vida, no era fácil, el era joven y todavía estaba aprendiendo. Después de todo él era su pequeño hijo y nunca podría dejar de defenderlo y estar ahí para él, realmente lo amaba con todo su corazón. Pero la persona que mas afectaba en su mente a Liam era Will, su hermano. Él sentía que lo había abandonado, que había dejado atrás todos los recuerdos de una vida de compañeros para traicionarlo y preocuparse por ser rey. Liam estaba frustrado por no lograr tener una vida normal, se estaba asfixiando con su propia sangre, sangre de familia de reyes que no podría simplemente lavarse, siempre iba a estar ahí, siempre iba a perseguirlo. Por eso era como era. Esa era su manera de rebelarse por que con palabras no le alcanzaban, pero estaba harto, harto de fingir ser alguien que no era, alguien frío y caprichoso. Pero es que no podía dejarse ablandar, era su secreto y moriría con el si fuera necesario.

-Karen puedes dejar de mirarme así?- Dijo ya cansado su esposo.

-No te miro de ninguna manera en especial Geoff- Contestó la reina desde su lugar en la cama. Siempre le gustaba llamarlo así en la intimidad de pareja, por que para ella, él no era William Geoff Payne el rey de Inglaterra era solo su esposo Geoff.

-Claro que me estas mirando de manera. ¿Que quieres de mi mujer? Hice todo lo que pude, tu hijo es imposible- Dijo el rey mientras se acomodaba en su lugar de la cama junto a su esposa.

Charming Prince // ziam fanfictionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora