Tres chicas cuyo trabajo las obliga a cambiar de pareja cada poco tiempo, Mia, Mar y Cler se ven sorprendidas por la noticia de otro romance nuevo, esta vez, con integrantes de una de las bandas más famosas del momento, One direction.
¿Podrán cumpli...
El sonido estridente de la alarma del móvil rompió el silencio de la habitación, resonando como un grito desesperado en la penumbra. Zayn, aún medio dormido, se incorporó de un salto, el corazón le latía con fuerza en su pecho. La luz del sol se filtraba a través de las cortinas, iluminando su rostro cansado.
"¡No, no, no!" murmuró, mirando la pantalla de su teléfono. La hora marcada eran las 7 am. La grabación comenzaba en menos de una hora. Se levantó de la cama, sus pies descalzos tocando el frío suelo mientras su mente comenzaba a despejarse. La adrenalina corría por sus venas, empujándolo a moverse más rápido.
Con movimientos ágiles, se vistió, el sonido de su ropa deslizándose por su piel mezclándose con el eco de la alarma que aún resonaba en su mente. Cada segundo contaba, y la presión de no llegar tarde lo impulsaba a actuar con una determinación renovada. Sabía que Louis ya lo iba a estar esperando.
Mientras se peinaba, su mente divagaba entre las letras de la nueva canción que estaban a punto de grabar. La emoción de crear música lo llenaba, pero primero debía salir de esa habitación y enfrentar el día. Con un último vistazo al espejo, se aseguró de que su mirada reflejara la confianza que necesitaba.
"Vamos, Zayn, puedes hacerlo", se dijo a sí mismo, antes de salir disparado hacia la puerta, listo para enfrentar lo que el día le tenía preparado.
Zayn llegó al estudio con una mezcla de emoción y tensión ardiendo en su pecho. Su caminar, aunque tranquilo, delataba su inquietud; la gorra le ocultaba parcialmente el rostro, como si tratara de esconder sus inseguridades de todos, incluso de sí mismo. En su mente, se repetían las dudas, las mismas que han estado con él desde la noche que pasó junto a Mar: "¿Seré suficiente? ¿Ella me verá de la misma forma que Harry? ¿Qué pensará Mar?".
Al entrar al estudio, ve a Louis, sentado en el sofá de cuero gastado, observándolo con esos ojos que parecen decir que todo estará bien, aunque él no termina de creerlo. Zayn se sentía expuesto, casi desnudado por la calidez de esa mirada; es como si Louis viera todo lo que él intentaba ocultar, cada capa de dudas e inseguridades.
Hace unos días que los dos chicos empezaron a verse de nuevo después del trabajo. Poco a poco estaban recuperando esa conexión y amistad que solían tener, por lo que Zayn, le había contado cada uno de los detalles de aquella noche junto a Mar y también expuso sus inseguridades ante la fatidica pregunta de Harry.
Louis no podía entender como el chico de cabello rizado pudo haberle hecho semejante comentario a su amigo, ya que Zayn, nunca había sido alguien que estuviera de mujer en mujer, si no todo lo contrario, sus relaciones eran de las más duraderas, sumando 2 años con su última pareja.
El chico de ojos azules, al ver a Zayn entrar al estudio, le sonrió, pero este apenas logró devolverle el gesto. - ¿Cómo estás hoy?
- Es complicado, aún no logro volver a subir a su casa... y mucho menos estoy preparado para verla hoy en la reunión. No hay forma de que pueda mirarla a los ojos, me siento idiota.
- ¿Le has seguido respondiendo a los mensajes no?
- Sí, bueno, nunca he sido un gran conversador pero últimamente siento que le respondo muy vagamente. - respondió Zayn tomando asiento junto al chico y dejándole su teléfono en la mano, con la conversación de Mar abierta para que pudiera observar por sí mismo todos aquellos mensajes.
Louis comenzó a scrollear, con permiso de Zayn, por el chat, leyendo por encima la conversación, después de unos minutos, se paró en unos mensajes con fecha de la semana anterior.
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