¿De verdad nos odias, bunny?

Cap. 92

Minji te ayudará con esto.

¿Que? -La miró.-

Quiere protegerte y al bebé también, no me pude negar, es mayor que yo, aunque no lo aparenta. -Sonrió ladina.-

No seas así con ella.

No soy nada, a Minji se le cambia la luna, tan santa como se ve, no es. -Alzo sus cejas y las dejó caer.-

Por cierto, que es un Sokolov? -La miró.-

Nuestro apellido Ruso.

Ah..

Cuanto quieres apostar a que mis hermanos harán esto. -Se preparo para actuar.-

"Oh bunny, lo sentimos mucho, empezaremos todo de nuevo, te lo prometemos".

-Jungkook soltó una carcajada.-

Santo dios, de donde sacas tanto, niña?

Del cucu. -Apunto su cien.-

Ya veo. -Salieron de la casa y Minji los estaba esperando afuera.-

Hola kook, ¿como estás? -Lo abrazo.-

Hola pequeña, ¿bien y tú? -Respondió el abrazo.-

Con ganas de ser Sokolov. -Se separo del abrazo.-

Vaya, ¿y tus padres saben?

-Minji y Charlotte hicieron silencio.-

Nuestros padres no nos dejan hacer esto, aunque no son tontos como para pensar que no lo hacemos, pero no lo hacemos al frente de ellos. -Charlotte dio la explicación del porqué.-

Oh, entiendo, bueno tienen razón sus padres. -Sonrió.-

Si, pero ya somos de aquí, no nos pueden detener ya. -Minji alzo sus hombros.-

Oigan, estoy en cinta y me asusta que salga así.

No te hagas víctima, bunny, sabes muy bien quien acabo con ese tarado y no le importó. -Movió las cejas.-

Oh verdad, muy bien hecho kooki. -Sonreí.-

Él se lo merecía, y lo volvería a hacer si besan a mis esposos y amenazan a mi hijo. -Dice sin remordimiento.-

Eso quiero ver en el juicio, si es posible recuerda a ese tarado vivo y expulsa al demonio que tienes encadenado. -Sonrió.-

Muy bien, lo haré. -Minji se adelantó por el hecho de sus padres.-

Ten cuidado, y te prometo un tatuaje.

Trato girasol.

Ey, ¿como que girasol?

Por tus mechas rubias y ojos cafés, y piel morena palida. -Sonrió.-

Gracias..

Un placer, nos vemos girasol. -Se fue con cuidado.-

> Los chicos.

¿Nos van a tener encerrados toda la vida? -Dijo detrás de las rejas.-

Merecen la muerte, ¿y tienen la cara para preguntar eso? -El guardia se acercó a la reja.-

Oiga jefe, nosotros fuimos víctima esta vez, sino pregúntele a dios. -Sonrió ladino.-

No seas impertinente Sokolov. -Dijo serio.-

-Yoongi sonrió ladino.-

Creo que eres muy irrespetuoso con Dios. -Golpeó la reja y Yoongi se alejó.-

Y yo soy ateo.

¿Y que tiene que ver, con el respeto?

No creo en tus creencias, de ser así ya te hubiera dicho que paso en Cheliábinsk en ese maldito galpón. -Lo miró retador.-