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No quería estar ahí, se sentía incómodo, aunque parecía ser el único porque su padre hablaba de lo más animado con la señora Han, por otro lado, Taesan no dejaba de mirarlo cada dos segundos y luego de aquella confesión no podia evitar sentirse un poco incómodo, menos con los halagos que el mayor le daba, por lo mismo evitaba mirarlo, no quería ponerse más nervioso e inquieto de lo que ya estaba.

Solo se encontraban los cuatro, pues el mayor de los chicos Han había tenido que regresar antes a su departamento, ya que él no vivía en la casa, más bien los había acompañado para ayudarlos con la mudanza y había decidido visitarlos.

—Jaehyun tu papá dijo que estudiabas pintura, en la misma universidad que Taesan —Comentó la mujer haciendo que el joven mirara a su padre por unos rapidos segundos—. Dijo que eras un artista completo.

—N-no... no lo creo, solo hago lo que me gusta — Respondió sintiendo sus mejillas arder levemente.

—¿Cómo qué no? Mi niño es un joven muy talentoso —Habló el adulto revolviendo su cabello con cariño.

—Me dijo que cantabas y bailabas muy bien, me gustaría verte algún día...

—No, eso no es posible —Intervino él conteniendo las ganas de salir corriendo a su casa y encerrarse en su habitación.

—¿Por qué no? Antes solías cantar en la iglesia — alegó su papá y haciendo que el llevará una mano a su rostro por instinto como si eso lo ocultara. —. Dijo que no podía seguir cuando entro a la universidad ¿Por qué no le cantas algo a la señora Han?

—Papá por favor —Suplico él mirando al mayor fugazmente.

—Está bien, puede ser en otro momento ¿Por qué no vas a buscar tus dibujos? Los olvide en el mueble de la cocina —Pidió su papá luego de hacer una pequeña mueca.

Jaehyun asintió despacio para levantarse e ir rápidamente por donde los dos adultos habían desaparecido luego de que ellos llegarán a esa casa, una vez que entro a la cocina tomó sus bocetos y los observo por unos segundos; de verdad quería irse a casa y quedarse en su habitación donde podía estar tranquilo, sin presiones.

—Ya entendí...

El joven dio un pequeño salto sobre su lugar y giro rápidamente sobre sus pies para encontrarse con el azabache más alto. Lo observo por unos segundos para luego desviar su mirada colocando sus dibujos a un lado, no entendía de que hablaba, pero probablemente terminaría haciendo que se colocará nervioso como cada vez que él le habla.

—¿Qué cosa? —Preguntó mientras se dirigía a la puerta para poder salir.

—Eres así por tu papá —Afirmó el mayor una vez que estuvieron cerca, el menor lo miró fijamente frunciendo levemente el ceño—. Tú no eres como aparentas ser, solo eres así por cómo es tu papá ¿Me equivocó?

—Solo me habla para burlarse... por favor deje de hacerlo, no lo conozco.

—Entonces quiero que me conozcas, podemos ser amigos, conmigo puedes ser tú, no quién tu padre cree que eres —Interrumpió el mayor sonriendo a gusto enseñando levemente su dentadura. Los ojos claros del menor eran hipnotizantes.

—No, no podemos ser amigos —Aclaró él negando de inmediato mientras desviaba su mirada para poder pasar por el costado del mayor.

—Es cierto, eres demasiado lindo para que seamos amigos —Dijo él haciendo que el menor se detuviera de inmediato y girara sobre sus pies torpemente para observarlo con sorpresa— ¿Qué?

¿Por qué decía esas cosas con tanta confianza?

No sé daba cuenta de que su padre podría escucharlo y nada bueno podía salir de eso, no con el pensamiento de su padre, él no lo entendía. No quería que su padre lo tratara mal a aquel chico, que se dedicará a darle una charla de lo mala que estaban aquellas personas, lo cual a él no le importaba, pero si a su padre.

Jaehyun regreso a la mesa y se sentó junto a su papá dejando sus dibujos con cuidado sobre la mesa para que estos no fueran a ensuciarse.

—No tuve tiempo de enseñársela en la cocina ya que nos pusimos a preparar la cena, pero aquí están —Habló su padre extendiéndole los dibujos a la mujer mientras sonreía ampliamente.

—Definitivamente tienes un gran talento, Jaehyun —Murmuró la adulta mirándolo por unos segundos con una encantadora sonrisa—. Dicen que cuando uno dibuja expresa su realidad.

—Si... En algunos momentos así es —Dijo sonriendo levemente, jugando con sus manos por debajo de la mesa al sentirse nervioso.

—Bueno, los dibujos son tan lindos como quien los hace ¿No? —Expresó Taesan haciendo que él contenga la respiración por un momento y mirara de reojo a su padre, pudo notar como la madre del chico le daba una rápida mirada y sonreía algo nerviosa—. Yo definitivamente no podría dibujar así, creo que no tengo tanta belleza.

—Pero ¿qué dices? Eres un chico muy guapo, de seguro tienes muchas pretendientes —Exclamó el padre de Jaehyun haciendo que el chico sonriera algo divertido mientras se miraba la mesa.

—Puede ser, aunque no me importan mucho las chicas... —Comentó el azabache sintiendo un golpe en su pierna, hizo una leve mueca y miro a su mamá—. La única que me importa la tengo al lado.

—Ay cariño eso es muy lindo, muchas gracias — Dijo la mujer apretando con un poco de fuerza la mejilla de su hijo haciendo que se quejara para luego acariciarla mientras miraba a los dos invitados.

Jaehyun observo la escena sonriendo levemente mientras jugaba con sus manos sobre su regazo, era algo tierno y divertido considerando que el mayor le había confesado ser homosexual, su madre lo sabía y por lo mismo estaba seguro de que lo que menos quería era que alguien como su padre lo tratara de una manera injusta.

—Tienen una muy linda relación —Opino su papá sonriendo enternecido—. Lamentablemente mi hijo no tuvo mucho tiempo para poder disfrutar a su madre...

Su mamá...

¿Por qué la mencionaba justo en ese momento y en ese lugar?

El castaño paso una mano de manera nerviosa por su cabello. No era necesario hacerlo, solo lo hacía sentir mal.

Taesan podía notar que el menor no estaba cómodo con ese tema, le incomodaba, al igual que cada vez que el adulto habla algo que tuviera que ver con él.

—Muuy bien, creo que ha sido una cena muy linda como para ponernos a hablar cosas así —Habló Taesan golpeando levemente la mesa con sus manos mientras se levantaba de su silla— ¿Les parece si Jaehyun y yo lavamos los trastes? Así ustedes pueden continuar hablando.

—Me parece una increíble idea —Dijo el hombre mientras miraba al menor haciendo un leve movimiento de cabeza—. Hijo, acompaña a Taesan.

—Está bien —Acepto levantándose para luego poner la silla en su lugar.

Ambos jóvenes tomaron las cosas que había sobre la mesa para luego dirigirse a la cocina y poder dejar las cosas en el fregadero, Taesan quito su saco y lo dejo en la mesa que había al centro de la cocina, miro al menor y sonrió mientras lo veía subir las mangas de su cárdigan claro, él subió las mangas de su camisa y se acercó al menor entregándole un paño.

—Tu seca lo que te pase ¿Sí? — Pidió sonriendo levemente mientras miraba al menor.

—Debo ayudarte...

—Lo harás, secando lo que te vaya pasando — Murmuró para luego pasar una mano por su cabello antes de comenzar a lavar la loza—. Solo relájate, tu papá no te está vigilando.

—No es eso...

—Si lo es.

koi no yokan | ddingdongz Donde viven las historias. Descúbrelo ahora