El aire de Grimmauld Place estaba impregnado de un aroma diferente esa mañana, una mezcla de flores frescas, pasteles recién horneados y magia pura. En el gran salón, decorado con delicadas guirnaldas encantadas, un grupo selecto de amigos y familiares esperaba expectante. El día había llegado: Severus Snape y Sirius Black estaban a punto de unir sus vidas en un vínculo sagrado, no solo como alfa y omega, sino como almas destinadas a estar juntas.
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La preparación de Severus
En el piso superior, Severus estaba de pie frente a un espejo antiguo, observando su reflejo. Las túnicas que llevaba eran de un blanco perlado, adornadas con detalles plateados que resaltaban su figura esbelta y su piel pálida. Su cabello, cuidadosamente peinado, caía en suaves mechones alrededor de su rostro. A pesar de la serenidad que proyectaba, sus manos temblaban ligeramente.
"Te ves hermoso," comentó Andrómeda Tonks, quien había insistido en ayudarlo a prepararse.
Severus le dedicó una sonrisa tímida. "¿Hermoso? Es un adjetivo extraño para alguien como yo."
Andrómeda negó con la cabeza, divertida. "Eres un omega bonito, Severus. Siempre lo has sido, y hoy más que nunca. Sirius no podrá apartar los ojos de ti."
Un rubor suave coloreó las mejillas de Severus. Había algo especial en este día. Su aroma natural, una mezcla de vainilla y margaritas, parecía más intenso, más dulce, como si su cuerpo supiera que este era un momento único.
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Sirius, el alfa impaciente
Abajo, Sirius caminaba de un lado a otro, ajustándose nerviosamente las mangas de sus túnicas negras con detalles en rojo oscuro. Remus, su padrino, lo observaba con una mezcla de diversión y paciencia.
"Sirius, si sigues moviéndote así, vas a desgastar el piso," comentó con tono calmado.
"No puedo evitarlo, Moony," replicó Sirius, deteniéndose por un instante. "¿Y si algo sale mal? ¿Y si Severus cambia de opinión? ¿Y si—?"
"—Severus nunca cambiará de opinión," lo interrumpió Remus. "Te ama más de lo que probablemente admite. Además, has visto cómo responde a tu aroma. Ese omega está completamente perdido por ti."
Sirius esbozó una sonrisa, sus feromonas de bosque y frutos silvestres comenzando a llenar la habitación, como si su cuerpo también estuviera emocionado por lo que estaba por venir.
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El inicio de la ceremonia
El gran salón se silenció cuando Severus entró, acompañado por Andrómeda. Todos los ojos se volvieron hacia él, pero Severus solo tenía ojos para Sirius, quien lo esperaba al final del pasillo.
Cuando sus miradas se encontraron, el mundo pareció detenerse. Sirius, con su porte alfa y su sonrisa radiante, parecía el eje del universo de Severus. Y para Sirius, Severus, con su aroma dulce y su belleza serena, era lo más perfecto que había visto.
Severus avanzó con pasos firmes, aunque su corazón latía con fuerza. Al llegar junto a Sirius, el aroma de bosque lo envolvió, calmándolo de inmediato.
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Los votos
"Severus Tobias Snape," comenzó Sirius, con la voz cargada de emoción, "prometo amarte y protegerte todos los días de mi vida. Eres mi luz, mi calma, y el único que puede mantenerme centrado. No importa cuán caótico sea el mundo, siempre te elegiré a ti."
Severus tragó con fuerza, su voz temblando ligeramente al responder: "Sirius Orion Black, prometo ser tu refugio, tu compañero y tu igual. Has traído a mi vida una calidez que nunca supe que necesitaba. Te amo... más de lo que las palabras pueden expresar."
Cuando la magia de sus votos envolvió la habitación, una suave brisa perfumada se extendió por el lugar: vainilla, margaritas, bosque y frutos rojos entrelazándose en una combinación única que parecía simbolizar su unión.
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El primer baile
Más tarde, mientras la fiesta seguía, Sirius y Severus compartieron su primer baile como esposos. Severus descansó su cabeza en el hombro de Sirius, inhalando su aroma tranquilizador.
"¿Estás feliz?" preguntó Sirius en voz baja, sus manos firmemente sujetando la cintura de Severus.
Severus levantó la vista, sus ojos brillando con una dulzura poco habitual. "Más de lo que imaginé que sería posible. Y tú, ¿estás satisfecho con tu omega?"
Sirius soltó una carcajada baja, inclinándose para rozar su nariz contra el cabello de Severus. "Severus, eres más de lo que podría haber soñado. No hay nada que desearía cambiar."
Y en ese momento, bajo la luz de las velas y rodeados de quienes los amaban, supieron que este era solo el comienzo de una vida llena de amor, risas y complicidad.
♡Hola de nuevo, ya solo falta el como severus y sirius descubrieron el embarazo y el parto de este y terminamos🥹
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té a media noche
Historia Cortaa severus se le antoja un té y empieza a recordar el como conoció a su esposo. ¡Quédate y descubrelo¡
