Manzana de la discordia

Capitulo 3 Incertidumbre

La cena a la mesa estaba deliciosa gracias a la ayuda de la señora de limpieza que visitaba al matrimonio Uchiha dos veces a la semana, quien aconsejó a la señora de la casa preparar todo los platillos disponibles a la mesa que los tres comían en silencio. Koichi desde muy temprano se le enseñó a comer en silencio mientras los adultos conversaban, pero papá y mamá, no lo hacían en los últimos meses haciendo que la hora de la cena fuera aburrida. Izumi no sabía cómo empezar una conversación con Itachi, y que no se molestará por tocar temas que no eran para la hora de la mesa. Sentía raro que hasta ello últimamente fuera un reto. Cuando llegó del trabajo pasó un tiempo con Koichi antes de hablar con ella sobre lo que iban a cenar y el comportamiento de Koichi en el colegio, de ahí no pasaron a más, y tampoco hubo beso de bienvenida o contacto físico. Izumi comenzaba a hartarse del comportamiento frío de Itachi, pero no sabía cómo hacérselo saber sin recibir crítica de su propia conducta como madre y esposa.

Terminaron, Itachi se retiró con la excusa que debía terminar trabajo pendiente en su despacho, dejándolos solos. Koichi paso a la sala de estar a ver su programa favorito que pasaban antes de bañarse e irse a la cama. En cuanto a Izumi, levantó todo, pues por la desconfianza de Itachi no tenía trabajadores domésticos que vivieran en el mismo techo, todos ellos pasaban una o dos veces a la semana, y se retiraban al terminar sus labores, lo que dejaba la enorme casa para los tres.

Después de terminar de levantar la mesa, Izumi paso a la sala de estar con Koichi, cuando de pronto el pequeño travieso volteó a ver a su mamá para preguntar si podía comer helado, a lo que respondió que sí. Fueron a la cocina y comieron helado en la isla de granito, después la hora de irse a dormir para Koichi estaba cerca. Izumi lo llevó a su alcoba y lo preparó para irse a dormir. Después de cumplir con sus deberes como buena madre pasó por enfrente del despacho de Itachi, pero ya se encontraba en la alcoba principal. Llegó la hora de averiguar si conocia a la amiga de Sakura, pero primero tenía que empezar una conversación con su cambiado esposo.

Itachi estaba recién bañado y llevaba una bata de baño, su cabello estaba mojado, pero estaba tan entretenido en su teléfono que aún no secaba su cabello con la secadora. Izumi vio la oportunidad de acercarse para darle una mano.

—¿Koichi? —preguntó Itachi dándole la vuelta a su teléfono para esconder la pantalla contra su muslo. Estaba sentado en la silla del tocador de su esposa.

—En su cama. Preguntó por ti, pero al final se quedó dormido. ¿Quieres que ayude a secar tu cabello?

Itachi asintió con la cabeza. Izumi se acercó y preparó la secadora de cabello, estaba por comenzar a platicar sobre la visita que le dio a Sakura, pero fue Itachi que comenzó con el tema que los llevaría a la tal Hinata.

—Sasuke, me hizo saber que otra vez esperan un bebé. ¿Te lo contó Sakura?

Como ya lo sabía no era malo hablar del segundo embarazo, de lo contrario Izumi no hubiera mencionado nada al respecto para llevarse bien con Sakura.

—Sí, aunque no porque hubiera deseado contármelo. Lo que pasó fue que llegué cuando tenía dos pruebas de embarazo sobre la mesa de centro de la sala de estar.

Izumi comenzó a secar el cabello. Itachi intentaba no verla por el espejo, su vista estaba hacia la pantalla encendida en la pared. Aunque su vista estuviera en el noticiero, su mente estaba pensando en otra cosa. Después de un corto silencio, Itachi volvió a decir:

—No le cuentes nada a mamá. Sasuke y Sakura, piensan revelarlo después del cumpleaños de ella. ¿Aún no te a llegado la invitación?

—No te preocupes, no diré nada. Hoy por la tarde me llegó. Sakura nos invitó antes cuando pasé a verla, y no sabes que sorpresa me llevé, una de sus amigas de modelaje apareció. ¿Sabes quién?