¿Qué demonios pasaba? Izumi llevaba días preguntándose desde el día que tuvo que rogar a Itachi que la tomará después de tres semanas sin tener relaciones. Al principio todo parecía divertido que estuviera haciendolo cuando siempre se daban de la manera más natural sin necesidad de decirse lo que harían por las noches cuando su hijo durmiera en su alcoba. Pero después de unos días de ver más distante a su esposo, comenzó a sentir que algo pasaba y debía averiguarlo rápido. Infedilidad era lo último que pasaba por la cabeza de la castaña, estaba segura de sí misma y de su esposo, que un tercero no era la raíz del problema.Hoy prepararía una deliciosa cena con platillos favoritos de Itachi, después tomarían té y hablarían seriamente sobre la relación de casados de siete años y diez de pareja. A los 10 años se conocieron, a los 15 fueron novios, y a los 20 se casaron demasiados jóvenes, 2 años después nació Koichi, un hermoso niño travieso que ahora tiene 5 años, y la pareja 27. En total llevan 17 años conociéndose, desde niños hasta adultos.
Itachi se encontraba estudiando para tomar el puesto de CEO en la compañía de la familia cuando se casó con Izumi.
En ese tiempo fue la esposa tradicional que apoyaba en todo a su esposo, como lo sigue haciendo hasta ahora. E Itachi, el esposo que sacaba tiempo para estar con su familia mientras en la intimidad fue de lo mejor porque a diario tenían relaciones. Sin embargo, las cosas fueron cambiando hace menos de un año cuando al fin Itachi tomó el puesto de su padre. Las llegadas tardes y los viajes de trabajo, Izumi tuvo que acostumbrase, pero nada de que temer gracias a las video llamadas y consejos de su suegra Mikoto, sobre su experiencia propia con su esposo Fugaku y madre de dos niños.
Izumi aceptó los nuevos cambios por el bien de su familia, pero más por Itachi. Nada sospechoso hasta que lo obligó a hacerle el amor, después todo se sintió extraño.
Izumi sintió a Itachi diferente. Después de lograr que quisiera tomarla fue como hacerlo con otro hombre. Comenzaron como completos desconocidos, Itachi pidió que se fuera a la cama, que pronto estaría con ella. Izumi fue a la cama y esperó vestida en un baby doll que compró en una nueva tienda de lencería, también se puso el perfume que a él más le gustaba. Mientras esperaba pudo ver que apareció en la alcoba con un semblante aburrido y fue directo a tomar una ducha sin prestarle el mínimo atención a su sexy esposita. Después del baño todo lo hizo de una manera lenta, secarse el cabello, untar crema corporal y desodorante, etcétera. A Izumi le dio la impresión que hacía tiempo para que se dormirá, pero no sucedió porque lo esperaba con los brazos abiertos.
Cuando al fin estuvieron juntos sobre la cama fue en ese momento que sintió que estaba haciendo el amor con un hombre extraño y no con su esposo. Los besos y caricias de Itachi fueron diferentes, llevando a Izumi a tener la peor noche desde que ambos comenzaron a intimidar a las edad de 16. Fue tan malo que tuvo que pedirle que se corriera porque tenía sueño, Itachi por su parte terminó fuera y le dio la esplada en toda la noche.
Izumi lloró en silencio por un tiempo hasta que se tranquilizó al pensar que exageraba. Se dio la vuelta y lo abrazó para dormirse pegado con él. Itachi no hizo nada para alejarla, pero tampoco reaccionó porque para este tiempo dormía profundamente.
A la mañana siguiente la misma rutina comenzó como si nada hubiera pasado la noche anterior. Despertó a Koichi para prepararlo para el colegio y le dio el desayuno mientras Itachi hacia los suyo en la alcoba. Cuando apareció para despedirse del diablillo de la casa, dio una mirada solemne a su esposa que intentaba mantener una sonrisa falsa. Después se despidieron como cualquier otro día sin mencionar lo que pasó la noche anterior. Tampoco Itachi hizo gestos amorosos para recompensar, actúa como de costumbre en los últimos meses, frío sin mucho que decir.
Después de la agria despedida, Izumi llevó acabo las tareas del día como ama de casa, limpieza y compras. Antes de levantar a Koichi del colegio fue a verse con su mejor amiga Kurenai a la casa del matrimonio Sarutobi. Kurenai tenía cinco meses de embarazo de su segundo hijo, también era ama de casa no por gusto, pues siempre fue amante de trabar por sus ingresos. Lo que hacía que la pelinegra estuviera en casa después de casarse eran los celos de Asuma. A diferencia de lo que atraviesan los Uchiha, en el matrimonio Sarutobi la llama de la pasión ardía que hasta el mismo médico pidió disminuir los encuentros carnales por la salud de la madre y del bebé.
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Manzana de la discordia
FanfictionIzumi Uchiha lleva años casada con Itachi Uchiha, con quien tiene un hermoso niño llamado Koichi. Fueron novios en la adolescencia y se unieron en un sano matrimonio a una temprana edad, impulsados por el amor que ambos sentían. Después de dos años...