Historias y one-shots Aikusen

La camisa de Aiku 🔞

Como ya dije en descripción, estas NO son mis historias, únicamente me encargo de traducirlas, créditos a su respectivo autor. Los oneshots de contenido explícito tendrán este emoji 🔞, si no te gusta este tipo de contenido puedes simplemente saltarlo. 🫂AUTOR DE LA HISTORIA: TodoMaggie

A Sendou le encanta usar las camisas de Aiku.

Quedan demasiado grandes y son camisones muy cómodos. Los usa la mayoría del tiempo, cuando pasan sus domingos de ocio en casa, estando simplemente en compañia mutua. A Aiku le encanta aún más, ver los tonificados muslos de Sendou, apenas medio cubiertos por su camisa, es algo que lo excita inmensamente. Siente que su corazón se acelera y, de repente, las ganas de morder esas piernas se apoderan de su cerebro.

Necesita sentir la carne blanda bajo los dientes. Necesita tocar, morder, reclamar. Todavía no puede creer que Sendou sea su novio. Es un hombre afortunado. Entonces se escabulle detrás de Sendou, muy lentamente, muy silenciosamente, y simplemente muerde esas piernas.

"¡Oliver!"

Aiku siempre toma desprevenido a Sendou, pero también divertido, porque su novio es un idiota. Hasta que las manos de Aiku comienzan a deslizarse hacia arriba sobre sus piernas, levantando su camisa para descubrir su bonito trasero, y el capitán comienza a mordisquear lujuriosamente esas mejillas.

"Eres tan lindo cuando usas mi ropa. Me haces desear poder adorarte todo el día. ¿Puedo, Shuuto? ¿Puedo besar cada centímetro de tu cuerpo? Dios, eres tan perfecto".

Aiku sabe que esas palabras siempre funcionan con Sendou, y esta vez no es diferente. El pelirrojo se derrite rápidamente bajo sus toques y pronto le ruega a Aiku que deje de jugar y se quite los boxers. Hay algo, en la forma en que Sendou ruega por sus toques, que añade años a la vida de Aiku. Su voz es como una melodía que da vida eterna. Sin embargo, Aiku no lo escucha. En cambio, levanta a Sendou al estilo nupcial, con todas las intenciones de llevarlo a su dormitorio. Quiere que Sendou se sienta cómodo mientras lo arruina.

Se revuelven en la cama entre risas y besos, la ropa desaparece tan rápido que es casi mágico. Necesitan la piel del otro más que el aire. Es una cuestión de supervivencia. Sendou abre las piernas, insinuante, tan jodidamente hermoso, y maldita sea, Aiku quiere devorarlo.

En un abrir y cerrar de ojos, su boca está en la ingle del pelirrojo, besando, mordiendo, susurrando suaves palabras de amor. Anhela el placer que le causa Sendou, arde por sus gemidos. Y esa pequeña y bonita polla se ve tan deliciosa. Entonces lo lame, como si fuera el mejor helado que jamás haya probado.

Y Sendou nunca deja de darle lo que más necesita: un delicioso gemido sale de esos labios carnosos, una oración, sólo para que Aiku se caliente, la mejor música del mundo. Ya está perdido. Se lo lleva a la boca. Sus grandes manos se cierran alrededor de los suaves muslos ajenos y Aiku da lo mejor de sí para complacer a su novio al máximo. Cuando está ahí abajo, entre las piernas de Sendou, siente que finalmente llegó al lugar al que pertenecía. Nació para hacer feliz a Sendou.

Su lengua juega con la erección de su novio, lame y chupa, reclama más de esos gemidos perfectos del hombre lindo que ahora acaricia su cabello. Está enamorado. Más de lo que jamás pensó que podría. Está completo. El orgasmo de Sendou llega rápido, sin siquiera darle tiempo a Aiku para pensar, inundando su garganta con un delicioso semen. Los gritos de Sendou, sus dedos tirando del cabello de Aiku, su semen deslizándose por su garganta, incluso la forma en que tiemblan sus piernas: todo es tan perfecto. El capitán se aleja mirando su as, el tesoro más preciado del mundo, mientras su corazón late aceleradamente. Esto es algo a lo que nunca renunciará. Esta es su nueva razón de vivir.