𝗚𝗢𝗢𝗗 𝗟𝗨𝗖𝗞, 𝗕𝗔𝗕𝗘!ㅤ𖹭ㅤchaennie

II

Nuestras manos temblaban y no podíamos mirar nuestros ojos sin reír, pero teníamos que hacer silencio, sus padres dormían y estábamos en la misma planta. El inocente deseo de experimentar ese beso era mutuo pero no sabíamos cómo comenzar. Buscar un tutorial de como besar fue su mejor opción. Yo solo me burlaba de ella por eso pero la verdad tampoco sabía cómo comenzar. Una vez me acercaba a ella comenzaba a temblar y sentía que estaba haciéndolo mal.

Con suavidad la hice recostarse bajo mi. Nuestros cuerpos no se tocaban pero si lo hicieron nuestros labios. Me permití abrir un poco mis ojos para verla mientras nos besábamos. No veía sus ojos pero si sus densas pestañas, su tierna nariz y sus cejas con algunos vellitos fuera de lugar pero que la hacían ver aún más hermosa. El cabello alborotado caía sobre la almohada.

Sus brazos se aferraban en mi espalda y toqué su rostro con suavidad, con la delicadeza con la que merecía ser tocada.

Entonces nos separamos lentamente y antes de poder ver sus ojos volví a la realidad. Los recuerdos eran tan claros después de tanto tiempo.

Giré sobre mí desde mi pupitre y la miré atrás de mí escribiendo en su cuaderno. Me levanté y pedí permiso para ir al baño.

Allí lavé mi rostro intentando recomponer la postura. Me miré en el espejo sintiéndome patética. De seguro ella ni siquiera recordaba aquello.

Me dirigí a la parte de los vestidores y me senté en el piso frío. Allí todo estaba demasiado silencioso pues todos estaban en clases.

—Sabía que te encontraría aquí.— La voz de Rosie llamó mi atención.— ¿Estás bien?

—Perfectamente, solo me aburrí de estar en clases.

Ella asintió y tomó asiento en la banca que estaba a mi lado. Desde aqui debía levantar la cabeza para verla.

—Estemos aquí un rato.—Dijo sonriendo.

Esta vez yo asentí y me acerqué dejando caer mi cabeza sobre sus rodillas.

Ella acarició mi cabello con suavidad, desenredandolo entre sus dedos. Ella comenzó a hablarme de Kook y yo, la escuché y aconsejé como siempre hacía.

Al final nos quedamos más del tiempo debido allí y la campana sonó indicándonos que ya había terminado la clase.

Durante el receso Rosie se fue con Jisoo, una amiga de otra clase. Ella también había sido mi amiga pero entonces tuvimos un problema y me insultó fuertemente. Después de eso dejamos de ser amigas. A Lisa le había ocurrido algo parecido con ella.

Fue Lalisa quién me hizo compañía durante esos 15 minutos de descanso. Ella no sabía nada de lo que yo sentía pero si sabía lo que había pasado hace años. Solía bromear con eso.

Hablamos de nuestro futuro. Ella quería estudiar derecho, era su sueño desde hace años y yo confiaba en que lo lograría.
Quería mucho a Lisa, a ella la conocía desde hace muchos años atrás, cuando teníamos unos 6 años y aunque jugábamos juntas muchas veces, no fuimos amigas hasta que llegó Rosie cuando teníamos 9.

La conversación cambió y entonces terminamos estallando en risas por las estupideces que decíamos. Acabé tirada sobre el piso riendo.

Cuando llegamos al salón, Rosé ya estaba ahí, miraba concentrada su celular y al minuto llegó Kook con el cabello mojado sacudiendolo para salpicarnos agua. Todas chillamos cubriéndonos con nuestros brazos mientras Lisa lo empujaba para alejarlo. Entonces se acercó especialmente a Rosie para lanzarle agua pero me interpuse. Llevaba el pelo planchado ese día, lo que menos querría era que se lo mojaran. Por eso terminé con el rostro lleno de agua por culpa de Kook.

Ella al verme sonrió y me agradeció con un abrazo. Entonces entre sus brazos me sentí en las nubes.