Capítulo 3
Ultimate Party
Había pasado toda la mañana con Denovan, eran las seis de la tarde y estábamos arreglándonos para la fiesta.
-Pruébate ese vestido- señalo Denovan.
-Es demasiado justo ¿No te parece?
-Mejor amiga, no está de más mostrar tus curvas ¿No crees?- enarco una ceja, mostrando su perfecta y blanca sonrisa de anuncio publicitario.
La mire de reojo y me cruce de brazos
Ella bufo y me pasó el vestido, me empujó al baño y cerró la puerta.
-¡NO TE DEMORES!
Suspire, abrí la boca para protestar y para decirle que había cambiado de idea pero era inútil ya era demasiado tarde, me termine probando el vestido y me mire en el espejo, sí que resaltaba cada curva de mi cuerpo. Los chicos de la fiesta iban a estar deseosos hoy.
El vestido era vino tinto, un poco más arriba de la rodilla y más abajo de los muslos, tenía mangas y encaje en la espalda.
-¡Llevas como diez minutos ahí dentro! ¿Necesitas ayuda? ¿Puedo entrar?
-Entra- le respondí
-Wau, ¡amiga estas que ardes!, vas a dejar a más de uno con la boca abierta- se río
-¿No muestro mucha piel? ¿Estoy bien?
-Estas perfecta, ahora déjame cambiarme a mí. Mientras yo me coloco el vestido tú te maquillas, así cuando estés lista me puedes maquillar.
Mi mejor amiga era fatal con el maquillaje, ella era buena escogiendo el atuendo y yo maquillando.
-Vale, apúrate.
Ya tenía el vestido, ahora luciría un bonito maquillaje de noche, utilicé base de maquillaje para uniformizar la piel y polvos para sellarlo, con la brocha grande iluminador, para mis pómulos un color ámbar, para mi mirada elegí unas sombras oscuras esto intensificaba mi mirada y le daba sensualidad, para mis labios opte por un rojo similar al de mi vestido y un poco de gloss y voilà.
-No sé cómo haces- refunfuñaba Denovan
Reí en lo bajo, ella tenía un poco de razón, hacia magia con mis manos
-Me toca, haz de tu magia en mí.
Hice un trabajo similar con Denovan, su vestido era negro, su altura hasta los muslos y el escote en v. El vestido hacia resaltar realmente su figura.
Después de 20 minutos ya había terminado, estábamos maquiladas, peinadas y vestidas.
-Te amo Laurie, gracias- me dio un abrazo y fue corriendo por los zapatos, era lo único que nos faltaba a ambas.
Lo único que no podíamos utilizar ambas eran los zapatos, ella era una talla más grande que yo. Y para situaciones como esta utilizaba los zapatos de emergencia en mi casa, es decir dejaba uno de sus pares de zapatos que combinaran con todo y fueran lo suficientemente cómodos para tenerlos toda la noche.
-Toma, ponte estos.- me pasó unos tacones negros altos.
-¿Qué hora es Lauren?- Gritó Deni desde el otro lado mi habitación, mientas se colocaba sus zapatos.
-Son las 7:49, queda tiempo amiga.
-¿Le pasaste la dirección al chico?
¡MIERDA LA DIRECCION!
-¡Joder, lo olvide!- me toque la frente y fui en busca de mi celular con desesperación.
¿Dónde coño esta mi celular cuando lo necesito?