Sombras de Redención: La Odisea del Caballero de Arkham

Prologo: El origen de Redhood

Hace dos años en el asilo se Arkham, en una celda que aún no se conocía ni siquiera por los mismos guardias.

Jason Todd, un niño del cual su único pecado fue querer estar con su padre, un niño que fue convertido en un soldado y mandado a la guerra, es torturado en una celda por el payaso loco del crimen, el Joker.

Día tras día Jason tenía la esperanza de que llegara su padre, Batman, a rescatarlo, pasaron semanas, meses... y la esperanza empezó a desaparecer, la flor que era el alma de Jason se marchitó... en su mente empezó a verse una sonrisa la sonrisa del Joker cada vez que cerraba los ojos

—Cuando vendrá papa...—Pensaba mientras por las noches en el asilo de Arkham lo único que podía hacer es llorar desesperadamente esperando...

Pasaron meses y llegó ese día... el maldito día en el que el Joker me mostró lo que más me dolió de toda su tortura, lo que más me destruyo...

-Asilo de Arkham/cámara oculta/12:32 pm

Estaba sentado en una silla con los ojos vendados, como de costumbre me venda los ojos cada que me va a hacer pasar por algo horrible, pero esta vez fue diferente, me quito la venda y pude ver la habitación en la que estaba...

Era un cuadrado bastante estrecho en el que solo podía ver en las paredes un signo con forma de "J" y unas sonrisas pintadas de color verde, enfrente mío un televisor gigante con un video pausado en el que aparecía mi padre, Batman

El Joker sin decir una sola palabra pero con una sonrisa macabra en su boca, parado al lado mío, puso en video en marcha

—¿Que me vas a hacer ahora? ¿Más quemaduras? ¿Me harás sangrar? —Le dije mientras me intentaba desatar de las cadenas que me puso, ya nada de lo que me hiciera podría hacerme sentir peor de lo que ya estoy, o eso creía

—Solo mira y espera la broma, esto te hará reír para morirse—Cogio mi cabeza y la puso apuntando a el televisor mientras se reía macabramente, una risa que se escuchaba rebotando en las paredes y llegando siempre a mi, una risa que alguien debería estar oyendo... no es así?.

—Bah, ¿otra broma de mal gusto? Que tal si me desatas y me mues- —antes de poder terminar el Joker me cubrió la boca con su mano y me obligó a ver la televisión, en ella estaba una grabación de el mismo Batman, en el mismo asilo en el que yo estoy Justo ahora.

—¿Padre está aquí? ¡¡Por fin vino por mi!!—intente decir sin mucho éxito .

—jajajajajajajajaja, oh nononono, estúpido joven maravilla el no vino por ti. Oye más de cerca—mientras su risa se iba rompiendo. Con fuerza agarro mi cara con su brazo derecho y me puso contra el televisor, haciendo que como el dijo yo "escuchara mejor".

Nada más oía a Batman hablando con alguien, dándole su situación mientras subía unas escaleras en las que llegaba a un lugar en el que se veia una sala en un cristal, la habitación estaba llena de con del miedo del espantapájaros y vi cómo lo roseaban de gas del espantapájaros.

Lo importante de esto es que Batman al ver un cadaver en el suelo por breves segundos dijo algo que logré escuchar "Robin, no lo pude salvar"

—¿Con quien está hablando? Yo soy Robin... ¿no?—con confusión eso fue lo único que pude pensar, el ajonjee apretaba su mano con mi boca para que no pudiera hablar, pero al yo oír esto me tiro al suelo con fuerza y empezó a caminar hacia una mesa con varias herramientas, un martillo, una llave inglesa y... una palanca

—¡¡Que está pasando!! ¡¡Por que le habla a alguien como si fuera yo!!—Grite, el grito se escuchó por toda la habitación mientras el ajonjee solo se reía, caminaba hacia las herramientas en las que tenía la vista centrada en la palanca

como por obra de magia las paredes en las que parecía que había algo pintado desaparecieron, eran de hecho pantallas que me rodeaban directamente, empezaron a aparecer en cada una de ellas videos de Batman y Robin... pero había algo raro

¡¡Ese no era yo!!

—Todo este tiempo, estuve esperando a Batman con esperanzas de que vendría, ¡¡¿¿todo fue una ilusión??!! ¿Cuánto duro en cambiarme? ¿Una semana? ¿Un mes?... ¡¡Dime estúpido payaso!!—El Joker empezó a reírse muy fuerte y al llegar a la mesa con las herramientas agarro la palanca y se acercó a mi

—JAJAJAJAJA JAJAJAJAJA JAJAJAJAJA—Su risa era una risa de un maniático, un maldito loco, un estúpido payaso de mierda. Este tipo me estuvo torturando por meses y yo solo esperaba a Batman que me buscara, ¿ese es el padre que tuve que tener?...

Sin perder el tiempo el Joker empezó a golpearme con la palanca, golpes simultáneos desde todas posiciones, no podía hacer más que aguantar el dolor, me dio un golpe en el pecho que aún puedo sentir, esa noche jamás la olvidare, su risa, el deseo de venganza que se formó en mi... y definitivamente, el odio que tengo al murciélago de dos patas...

—¡¡Ya no más!!—con ira en mi corazón rompí las cadenas que me tenían en cautiverio y detuve la palanca del Joker, enseguida lo tiré al suelo y con mi alma rompiéndose cada segundo más, con mi mente destrozandome, con el sudor cayendo por mi frente...

—Vete, príncipe del crimen, pero no te olvides que—Lo tome de la camisa y lo levante enfrente mío —Vuelves a dignarte a aparecer enfrente mío, y tú última noche no será contra ese estupido murcielago—

Lo deje ir y salí del asilo, paso un tiempo antes de que pudiera irme del asilo gracias a el show que estaba haciendo el payaso esa noche, pero al amanecer unos guardias me encontraron, se dieron cuenta que no era un preso y me sacaron de la isla apenas pudieron, no pude encontrarme en toda la noche con Batman y... eso... es algo doloroso.

Calles de Gotham/1 de noviembre/9:03

Ya todos sabemos lo que paso ayer, el espantapájaros atacó Gotham, yo estaba en sus tropas como el Caballero de arkham... y lo que no sabía es que el Joker había falsificado las grabaciones... mías y las de mi padre... malgasté tiempo buscando venganza en algo que no debí, ¿y ahora?... Batman está muerto.

Ahora no soy ni Robin, ni el Caballero de arkham... soy Redhood, y Gotham tendrá que dejarme ir... por que ahora, encontrare mi propio camino.