La habitación parecía encogerse, atrapándonos en un vórtice donde el mundo exterior dejó de existir. Cada movimiento, cada respiración, cada palabra no dicha parecía amplificar la tensión que nos envolvía.
Helena.- Esto no puede durar, Rafe... -murmuro entrecortadamente, separando mis labios de los suyos por un instante que parece eterno. Mi frente se apoya contra la suya, intentando encontrar algo de estabilidad en medio del caos-. Nos va a consumir vivos.
Rafe no responde de inmediato. Sus ojos me examinan, como si estuviera buscando una grieta en mi determinación, una señal de que estoy igual de perdida que él.
Rafe.- Entonces que nos consuma. -su voz es apenas un susurro, pero en ella hay una certeza que me hace estremecer-. Prefiero eso a vivir un solo día sin ti.
Helena.- Rafe... -mi voz tiembla, pero no puedo negar el eco de esas palabras en mi interior. El peso de lo que significan me abruma, pero también me libera de una forma inexplicable.
Sus manos suben, enredándose en mi cabello con una suavidad que contrasta con la fuerza que ha demostrado hasta ahora. Su mirada sigue clavada en la mía, como si estuviera dispuesto a desnudar cada pensamiento que trato de esconder.
Rafe.- No puedes seguir huyendo de esto, Helena. No puedes seguir huyendo de mí. -su tono es firme, casi como una declaración de guerra-. Puedes intentar negarlo, pero ambos sabemos que no funciona.
Siento un nudo formarse en mi garganta, y una mezcla de rabia, tristeza y deseo se arremolina en mi pecho. Quiero gritarle que se equivoca, que puedo controlarlo, pero mi cuerpo me traiciona, y lo único que hago es quedarme allí, mirándolo, perdida en esos malditos ojos que siempre me han atado.
Helena.- ¿Y qué pasa después? -pregunto, intentando mantener algo de control-. ¿Qué hacemos con esto? ¿Cómo seguimos sin destruirnos?
Rafe se ríe suavemente, un sonido oscuro y áspero que me eriza la piel.
Rafe.- ¿Destruirnos? -repite, como si la idea le pareciera absurda-. Helena, ya estamos destruidos. Tú y yo... nunca fuimos piezas completas. Pero juntos... -hace una pausa, acercándose aún más, hasta que sus labios apenas rozan los míos-. Juntos, somos algo que nadie más puede entender.
Sus palabras se clavan en mí, y por un momento siento como si el aire me faltara. Quiero creerle, quiero dejarme llevar por esa intensidad que siempre ha definido a Rafe, pero el miedo a lo que podríamos ser, o a lo que podríamos destruir, me detiene.
Helena.- No sé si puedo hacer esto. -confieso finalmente, mi voz apenas un murmullo.
Rafe.- No tienes que saberlo ahora. -responde, su tono más suave de lo que esperaba-. Solo quédate aquí conmigo, esta noche. Déjame demostrarte que esto, lo que sea que tengamos, no es un error.
El silencio se instala entre nosotros, pesado pero cargado de posibilidades. Finalmente, asiento, dejando que mi resistencia se desvanezca. Porque aunque sé que esto puede terminar en desastre, también sé que no puedo alejarme de él.
No esta noche.
ESTÁS LEYENDO
The Devil ||Rafe Cameron
Romance-Enserio Helena? vas a hacer como si no hubiera pasado nada entre nosotros? -Ya no te reconozco Hola soy Helena Hener, hija de un amigo íntimo de ward cameron y una kook , aunque hubiera una diferencia de edad un poquito grande la gente nos miraba...