Ella era diferente, inevitable, inefable
A veces tan tierna, tan cálida, tan niña
A veces tan fría, tan distante, tan mujer
Era ella, sencillamente ella
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º Los 100 Fanfiction
º Bellamy Blake x Oc Reader
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14. Piensa en mi
Decir que Kalea Hale se sentía estúpida, era poco. Aún se lamentaba por haber bajado sus defensas la noche anterior respecto a Bellamy Blake.
Se había cruzado un par de veces con Emily. La rubia no había disimulado al verla de mal manera y criticarla. Pero Kalea sabía que necesitaba ser madura y no andar con juegos por el chico. Había cosas más importantes por las cuales preocuparse.
Por lo tanto, mantuvo su mente ocupada en cualquier actividad en la cual pudiera participar, mientras al mismo tiempo evitaba toparse con el mayor.
⎯Kalea —llamó Clarke apenas la vió cruzarse en su camino.
Era el momento. Necesitaba hablar con ella y romper el hielo que se había formado. Se acercó a la pelirroja, antes de que ella pensara en huir de nuevo.
⎯¿Podemos hablar un momento? —la pelirroja asintió al ver que no tenía escapatoria ⎯. Yo...quiero disculparme por todo lo que pasó. No pensé las cosas y te juro que nunca fue mi intención tener que llegar al punto de expulsar a Murphy. Debí haberte escuchado y entiendo si me guardas rencor.
⎯No lo hago —respondió ⎯. Es lo que tuvimos que hacer, él cometió un error y tenía que pagar por ello. No es culpa de nadie, a todos se nos salió de las manos.
⎯Haremos las cosas mejor —prometió con una pequeña sonrisa.
⎯Lo sé —sonrió sin mostrar los dientes ⎯. Tienes una buena fachada de líder, así que creo que puedo confiar en ti.
Clarke se animó a abrazarla apoyando su mentón en el hombro de la pelirroja ⎯Tú mamá estaría orgullosa —susurró.
Kalea la rodeó sintiendo sus ojos picar. Una parte de su corazón se alivió al saber qué las cosas con Clarke estaban bien, que no había perdido a alguien más.
⎯Gracias —respondió separándose, ambas tenían sus ojos cristalizados ⎯. Te extrañé mucho, Clarke.
⎯Yo también, Kal.
⎯Sí se besan, me vomito —habló Octavia colocándose a lado de ellas. Ambas chicas soltaron una risa separándose por completo ⎯. Vaya, sentí una tensión por aquí. Comienzo a sentirme como una tercera rueda.
⎯No lo eres —sonrió Kalea pasando sus brazos por los hombros de ambas, invitándolas a caminar un poco.
⎯Hay un grupo que saldrá de caza, aún nos falta acomodar la tienda de suministros e ir por agua —informó Octavia.
El campamento estaba a poco de ser terminado. Todos estaban de acuerdo con las nuevas reglas de ser una nueva comunidad alejada de la crueldad que el Arca suponía.
