Chicos de BNHA x T/N (one shots Lemon)

Hitoshi Shinso💜

Shinso... un chico verdaderamente frío, distante y algo sombrío, pero verlo directamente a esos ojos púrpuras era como sumergirse en una galaxia llena de estrellas.

Este estudiante casi no hablaba con nadie, más que con algunos de sus compañeros de la clase "C", sonreía de vez en cuando, rara vez... Pero había un detalle, él, en secreto había puesto el ojo en una linda señorita, de cabellos largos y plateados, ojos morados tirando a un fucsia brillante, piel suave y sobre todo, una personalidad un poco... bueno, muy extrovertida, tanto que a la par de Tenia Iida y Yaomomo, era una de las dos vicepresidentas de la clase A.

Al ser de diferente clase, Shinso casi no veía a la chica de sus sueños, era perfecta, si. Pero el verla tan poco lo ponía más deprimido de lo normal, más distante, más todo.

Él solo quería verla a ella, quería tocar su cabello, su piel, su rostro... Quería que fuera suya, suya y de nadie más.

Quién podría pensar que a un chico como él,  le gustase una chica que era literalmente casi todo lo contrario a su persona.

Así pasaron las semanas, incluso los meses, todo en secreto, nada "relevante" para quienes notaban las miradas de Shinso en aquella chica cada vez que pasaba por los pasillos, y es que... ¿Quién era él para resistirse a tal belleza andante?

Lo llenaba de emociones sentirla cerca, esos cruces de mirada, incluso una vez chocaron hombros a la hora de entrada... Wow... estaba enamorado, no había duda. Pero ella simplemente parecía no notar al pobre chico despeinado y ojeroso que la veía "raro"... incluso a veces le asustaba, no era discreto, pero a la vez se veía tierno observándola mientras él, de la emoción y sonrojo, cubría su nariz y su boca rojizas con aquella... bufanda gris prestada por Aizawa Sensei.

Bueno, aunque cuestión de tiempo fue para que se diese cuenta de que él simplemente estaba enamorado, y le pareció ciertamente tierno, quería acercarse también, pero... ¿Cómo?

. . . . .

Estaba en el pasillo, esperando a un compañero con quien haría un trabajo en equipo hoy, cuando lo vio, estaba por irse hasta que... la vio, vio a la señorita t/n pasar por ahí con una pila de libros que Yaomomo le había dicho de llevar a la oficina del director, hasta que pasó lo que tenía que pasar, tropezó pero los libros quedaron en el aire, sostenidos por una...

-Una tela gris? No es de Aiza...-

La chica miró de donde provenía la tela, hasta que miró a aquel chico de cabellos morados sosteniendola, soltó los libros con delicadeza y orden en el suelo, uff... menos mal no se había hecho un desastre.

—Ten más cuidado, pequeña-

Ella simplemente recogió sus libros y se fue, dejando indignado al pobre chico que solo intentaba ayudar.

. . . . .

Semanas luego de aquello, Shinso se sentía avergonzado, pero no podía ocultar ni extirpar esos sentimientos de su mente, era como si estuvieran pegados por un pegamento mágico que no se quitaba ni con la mejor magia del mundo.

— ¿Qué me pasa? Yo antes no era así... no, debo cambiar, es solo una chica, hay millones en este mundo, no me puedo estancar por una... es una más del montón—

Decía en su mente, pero en el fondo esos sentimientos cosquillosos, mariposas en el estómago y latidos fuertes del corazón lo atacaban cada que la veía... ¡Maldita sea! Quería dejar eso atrás, ya no quería seguir viéndose de esa manera.

. . . . .

Y así, el tiempo fue pasando, hoy, era un día especial, un día donde en vez de clases aburridas, habría una muy buena y elaborada practica mezclada con juego para los estudiantes de las clases 1 A, B y C.