-★𝙐𝙣 𝙖𝙢𝙤𝙧 𝙪𝙣𝙞𝙘𝙤 [𝘽𝙪𝙣𝙣𝙮𝘿𝙤𝙡𝙡]★-

𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟑 - ¿𝐔𝐧 𝐫𝐮𝐢𝐝𝐨 𝐞𝐱𝐭𝐫𝐚ñ𝐨 𝐩𝐨𝐫 𝐥𝐚 𝐧𝐨𝐜𝐡𝐞?

–Raghata dormía plácidamente en la madrugada cuando un leve sonido la hizo abrir los ojos, confundida. Entre el cansancio y la calma, decidió ignorarlo, creyendo que era su imaginación, y volvió a cerrar los ojos. Sin embargo, justo cuando estaba a punto de dormirse de nuevo, un golpe seco y estridente la hizo sentarse de golpe, con el corazón acelerado.–

CRASH.

-El fuerte sonido metálico la hizo sobresaltarse de inmediato. Se incorporó rápidamente, con el corazón latiéndole a mil por hora. Miró alrededor de su habitación, intentando encontrar una explicación para lo que acababa de escuchar, pero no había nada fuera de lugar.-

-¿Qué demonios fue eso? -Murmuró en voz baja, frotándose los brazos.-

-Pensó, por supuesto, en Jax. Era el único que podría ser lo suficientemente molesto como para hacer ruido a esas horas sólo para fastidiarla. Con un suspiro pesado, se levantó de la cama y abrió la puerta, asomándose al pasillo. Estaba vacío y oscuro, iluminado apenas por las tenues luces parpadeantes del lugar.-

-Jax, si estás intentando asustarme, te juro que... -Comenzó a decir en voz alta, pero se detuvo al darse cuenta de que no había nadie allí.-

-De pronto, un sonido más suave, como un leve crujido, se escuchó a lo lejos, haciendo que su piel se erizara. Era extraño, casi como si alguien estuviera moviéndose por el área común. Con pasos cautelosos, comenzó a caminar por el pasillo, sintiendo que el ambiente se volvía más y más pesado.-

-Cuando llegó a la sala principal, no encontró nada extraño. Todo estaba como lo habían dejado después de la cena.-

-¿Tal vez sólo fue mi imaginación? -Murmuró, tratando de convencerse. Pero justo cuando estaba a punto de darse la vuelta, otro sonido la detuvo en seco.-

-¿Raghata?

-Ella pegó un pequeño brinco, girándose rápidamente para ver a Jax, que estaba detrás de ella con las orejas caídas hacia atrás. Parecía igual de confundido que ella.-

-¡Jax! ¿Qué haces aquí? -Susurró, llevándose una mano al pecho para calmarse.-

-Lo mismo que tú, al parecer. -Respondió él, en tono más bajo de lo normal.- -Escuché un ruido raro. Pensé que eras tú haciendo alguna tontería, pero parece que no.

-¿Yo? -Bufó ella, aún en voz baja.- -Pensé que eras tú. Esto tiene tu estilo escrito por todas partes.

-Él levantó las manos en señal de inocencia. -Oye, esta vez no fui yo. Pero si ambos lo escuchamos...

-Entonces algo está pasando. -Terminó ella, con el ceño fruncido.-

-Ambos se quedaron en silencio, escuchando atentamente. Por un momento, todo estuvo tranquilo, pero luego se escuchó otro ruido. Era más lejano, como si viniera de una de las áreas menos transitadas del circo digital.-

-¿Lo oíste? -Preguntó Raghata, su voz apenas un susurro.-

-Sí, claro que lo oí. -Respondió Jax, su sonrisa habitual completamente ausente. -¿Quieres ir a ver qué es?

-¿Y dejar que sigas haciendo comentarios sarcásticos mientras me asusto? Claro. -Replicó ella, pero su tono tenía un toque de humor nervioso.-

-Comenzaron a caminar juntos por los pasillos, con Raghata liderando y Jax siguiéndola de cerca. A pesar de su actitud despreocupada habitual, parecía más alerta de lo normal.-