Capitulo 2

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*seis años después*

-¡Nick ayúdame!- grito Demi -Es una serpiente, va a morderme- dijo retrocediendo y pasándose la mano por el cuello.

-¿Que pasa?- susurro él mientras se acercaba.

-Mira, una serpiente- dijo ella señalando al suelo, claramente asustada.

Nick miro hacia donde Demi le indicaba que estaba la serpiente. No pudo evitar reírse de la situación..

-Pero Demi, es solo una pequeña oruga- dijo mientras se acercaba al animal.

-Noo! No te acerques a ella, va a morderte y seguro tiene veneno- le advirtió Demi en un tono de preocupación y miedo.

-Cálmate Demi- dijo sin poder contener la risa. -No tiene veneno porque no es una serpiente, mírala, solo mide dos centímetros- dijo Nick mientras reía y Demi torcía los ojos.

*Narra Demi*

¿Esta riéndose de mi? No puedo creer que el sea así, es una serpiente joder, seguro quiere morderme el trasero y huir, lo veo en sus ojos, esos ojos venenosos.. o ¿sera que estoy exagerando? Nick dice que es una oruga.. puede ser, pero mide como 10 metros.. Esperen, bueno tal vez solo algunos centímetros, pero igual no me gusta, tengo miedo. No se porque acepte venir al bosque con Nick, ha sido mi amigo desde hace seis años, recuerdo esa vez que lo vi por primera ocasión frente a la puerta de mi nueva casa. Su mirada tímida, como si creyera que iba a robarle sus juguetes (los míos eran mejores) pero yo quería tener algún amigo, en mi antigua casa se habían quedado todos y era lo que me molestaba de cambiarme de ciudad.

Odiaba tener que mudarme, mi vida estaba allá en Dallas y que ahora nos mudáramos a New York era difícil para mi tener que entender todo lo que pasaba en ese entonces, pero desde que conozco a Nick debo decir que fue mas llevadero todo, solo tengo catorce años y ruego porque él se quede siempre a mi lado.

-Nick vamos a casa- casi le suplique -Odio el bosque, hay serpientes y todo eso- le dije casi en un susurro, mientras me sentía nerviosa. El me miro con su cara indescifrable de siempre -Vamos Demetria- me dijo mientras sonreía picaramente, él sabia que odiaba  que me llamaran así -Como digas Jerry- alce mi rostro victoriosa, ya que el también odiaba que lo llamaran por su segundo nombre. Ambos reímos a la vez. 

-¿En que pensaban nuestros padres para ponernos esos nombres tan ridículos?- pregunto Nick con una sonrisa. 

-Espera, ¿estas diciendo que mi nombre es ridículo?- puse mi cara seria. -Yo.. mm.. No quise decirlo de esa forma- dijo nervioso -Da igual, porque tu nombre es mas ridículo que el mio, Jerrysito- me solté en risas, mientras el torcía sus ojos y también reía. 

Corrimos a casa, hoy era la primera vez que andábamos sin nuestras bicis. Quería ducharme y tirarme a mi cama para dormir.

**Narra Nick**

-Adiós Nick alias Jerry, alias torpe, alias mejor amigo- me dijo mientras caminaba de espaldas hacia la puerta de su casa y me miraba divertida. -Adiós Demi, alias ¡Ayuda una culebra venenosa! alias mejor amiga- Sonreí al verla torcer los ojos y gritar: -Ojala te hubiera mordido el trasero, Jerry- sonrio entrando a su casa, mientras yo entraba a la mía. Aun recuerdo su cara asustada por una simple oruga, porque eso era, una simple oruga que sera mariposa pronto.

Tome una ducha y me acosté en la cama. Mientras miraba al techo me permití repasar mi día, pero solo podía recordar las horas que pase junto a Demi, sus ojos, sus labios... Esos labios. ¿Espera que? Porque estoy pensando en los labios de Demi, si es una molesta mujer.. ¿mujer?... ok, se que ya no es una niña, he notado algunos cambios a través de estos años y aunque jamas me atrevería a decírselo se ha convertido en una hermosa chica, quizás en su escuela los chicos mueren por ella, o puede ser que no la soporten como yo lo hago, pero ¿que pasaría si alguien mas se fija en sus labios... esos hermosos labios? "¡Ya detente Nick!" me digo a mi mismo en silencio, no puedo ver a Demi de otra forma que no sea como mi mejor amiga, aunque tenga esos labios... esos labios.

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Nick jamas se hubiera imaginado que esos simples pensamientos se convertirían en su religión, cada noche, siempre que estaba en su cama pensaba en Demi, en su forma de caminar, en su forma de mover sus labios mientras hablaba de algún libro que había leído, en su delicada forma de tumbarse junto a el en el jardín de su casa mientras veían las estrellas del cielo, la piel delicada de sus manos que en ocasiones tomaban las suyas sin ninguna intención. Él no entendería nada de lo que sentía, tenia miedo de exponer sus sentimientos, ni siquiera estaba acostumbrado a sentir ese tipo de cosas, pero sin quererlo Nick estaba cayendo en el embrujo del primer amor, se estaba enamorando de su mejor amiga. Ese primer amor que lo obligaría a dar todo de si. Ahora Demi era la culpable de sus misteriosos y extravagantes sentimientos, pero sus miedos irían mas allá de si mismo.

Unos meses después, Nick sentiría lo que el dolor le puede causar al corazón y como el miedo te bloquea para hacerte perder lo que mas amas. 





Si ella supiera (Nemi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora