El sol golpeo mi cara haciendo que me despierte rápidamente. Cuando abrí mis ojos, estos quedaron segados por la fuerte luz que atravesaba la ventana. Me senté sobre mi cama recordando la noche anterior y un escalofrió atravesó mi espalda. Me levante lentamente y me diriji hasta el ropero para cambiarme, me puse un jean negro y una remera blanca con dibujos negros, unas vans violetas y mi gorro gris. Me puse un poco de maquillaje en la cara y me peine el pelo en una coleta, y por ultimo un poco de perfume.
Antes de salir le mande un mensaje a Cal para que me pase a buscar, ya que no quería verle la cara a mi hermano.
Tenía miedo de mi hermano. Si de un día a otro puede cambiar tanto, ya no se que esperar de el. Me encuentro sola, él era el único familiar con el que me hablo desde la muerte de mi padre. El es el único que me entendió desde el accidente. El y yo, los hermanos, inseparables. Pero eso terminó, o por lo menos hasta que deje de consumir droga.
Entiendo que tal vez este exagerando un poco la situación, pero yo jamas espere algo así, no de el.Agarre mi bolso y lentamente abrí la puerta, cruce el largo pasillo con pasos lentos, y en puntitas de pie baje las escaleras.
Ashton, seguramente, este durmiendo y mi madre trabajando. Ella llego tarde ayer por la noche, pero la verdad que no me importa, ella y yo casi ni nos hablamos ya que ella pasa mucho tiempo fuera de casa y cuando llega tan solo sube a su cuarto.
Cuando llegue a la sala, la panza me rugía de hambre ya que ayer no cené, pero no quiero hacer ruido en la cocina, no hoy.
La bocina del auto de Cal sonó, haciéndome sobresaltar. Salí por la puerta de entrada y ahí lo encontré, su hermoso auto negro que brillaba por la luz del sol. Me subí en la parte delantera y apoye mi bolso en mi regazo.
-Hola Kate- Dijo James simpático como siempre- ¿Todo bien por ahí?
- Si, claro. Todo anda muy bien...-Dije pero no lo logre convencer. Pero, por suerte, una idea se me cruzó por la cabeza. Tal vez podría ir a aclarar las cosas con ese chico.
-Mmh..De acuerdo-Dijo el buscando algo- ¿Quieres? -Me pregunto mostrándome una barrita de cereal, amaba esas cosas y el lo sabia. Por eso es mi mejor amigo.
-Ohhhhhh! Te amo- dije sonriendo ampliamente, el si que me entendía.-Gracias- dije desenvolviendo la barrita.
Vi como el sonreía de lado dejando ver sus blancos dientes. Arrancó el auto y sus brillantes y lindos ojos marrones osuros me miraron divertidos y se despeino un poco su, ya alborotado, cabello negro.
-¿Que acaso te gusto? Deja de verme, me incomodas- Dijo y me lanzo un beso. Negué con la cabeza divertida, y vi como sus músculos se le marcaban cada vez que giraba el volante. Si, el era sexy, pero solo como amigo.
Cuando llegamos a la escuela mi primera clase era geografía, la misma de Calum, así que nos sentamos juntos. Fue muy divertido reírme tanto con el, su personalidad era algo completamente admirable, el jamas ah estado triste por algo que no sea serio, siempre se lo ve con una gran y hermosa sonrisa en el rostro, siempre haciéndose el gracioso y jugando como un niño pequeño.
Las clases pasaron comúnmente, cuando la campana sonó nos fuimos a la cafetería y converzamos un rato. Devuelta a clases todo siguió normal, me dejaron mucha tarea y me informaron sobre las siguientes evaluaciones.
Cuando las clases terminaron y me tenia que ir a casa, comencé a caminar a paso lento para así tardar en llegar. Tome mi recorrido habitual, pero al pasar las primeras cuadras me encontré con ese chico, ese chico al cual odiaría por el resto de mi vida.
Estaba apoyado en su gran moto negra, fumando un cigarro. Yo me acerque rápidamente a el, haciendo que me mirara. Sus ojos eran algo intensos, tenían una mezcla de celeste y azul combinados. Al parecer tenia una barba de no mas de dos días.
-Hola linda- Me dijo con voz ronca y varonil- ¿Buscas a algo?
-Escucha- comencé yo- No me importa quien diablos seas, ni que estés haciendo con mi hermano, pero solo te diré que dejes de darle esas malditas cosas, no le arruines su vida.
-Escúchame tu a mi -se despego de su moto y tiro su cigarro tras darle una ultima calada- Deja de meterte en mis asuntos. Yo le venderé a quien yo quiera venderle. Yo le cagare la puta vida a quien yo decida, y para tu maldita información el decidió meterse en esto. Ahora vete o yo te sacare y no quieres eso, créeme.
-Tu no me puedes sacar de ningún lado - di un paso hacia el y haciendo que el también se acercara- Si quieres cagarte tu vida haciendo esto, pues hazlo, al fin y al cabo es tu vida. Pero no metas a Ashton en todo esto, ¿escuchaste?- El rió sarcásticamente.
-Si crees que una estúpida niña como tu puede controlarme -se acerco mucho mas a lo que yo retrocedí- Estas totalmente equivocada, y créeme ya lo han intentado. No te metas conmigo, porque acabará de la peor forma.
Nuestras distancia no era suficiente, por lo cual nuestras caras casi se podían tocar, sentía su cálida respiración en mi cara y mi corazón comenzó a latir. Podía oler su colonia mezclada con el fuerte olor a cigarro. El rápidamente se dio media vuelta y se monto en su moto, acomodo su chaqueta de cuero negra y apretó los aceleradores de ella para después arrancar a gran velocidad, pero no sin antes mirarme y decir
-Por cierto soy Luke Hemmings. Así que metete en tus malditos asuntos. Esto no es para ti ,hermosa.