Contrato Para 2

⭐22⭐

YOONGUI

Yoongui se hundía mas en el asiento de la camioneta mientras manejaba, la mirada fija en la carretera. El rechazo lo había golpeado como un puñetazo directo al estómago. No podía creer que lo hubieran dejado de lado así y mucho menos la primera vez que decide ser más abierto sentimentalmente. La frustración lo consumía, la ira le hervía en las venas y la herida en su orgullo ardía como fuego. Se sentía incomprendido, invisible lo cual era algo irónico viniendo de una super estrella. Una profunda tristeza lo envolvía.

Lo odiaba, odiaba sentirse de esa forma pero su parte mas razonable entendía que había decidido enamorarse de la persona equivocada y claramente estas eran las consecuencias.

Manejaba por la carretera a una velocidad en la que J-Hope probablemente estuviera pegando gritos escandalosos de terror, no tenía dirección alguna, no quería ver a nadie, no quería hablar con nadie y tampoco quería ir a casa a dejar que la rabia y frustración lo consumieran en la soledad de su habitación.

Dió play al reproductor de música dentro del auto en un vago intento por despejar su mente y comenzó a sonar Friends - De Chase Atlantic. Buscó en el cajón de la camioneta y sacó un paquete de cigarrillos, sacó del bolsillo de su chaqueta un encendedor, tomó uno de los cigarrillos entre sus finos labios y lo encendió. Mientras daba una profunda caláda bajó la ventanilla del asiento del conductor y dejó que la brisa de la fria y oscura noche le golpeara el rostro llevandose consigo el humo que exhalaba.

La música seguía sonando y Yoongui seguía absorto en sus perturbados pensamientos, cuando de pronto sintió unos leves golpes en su hombro derecho, miró por el retrovisor y pisó asustado el freno de golpe haciendo que la persona que iba detrás chocara bruscamente con el asiento de conductor.

-Qué Mierdas!!? - Yoongui respiraba de forma acelerada por el susto provocando que el cigarrillo entre sus labios callera en sus piernas, de inmediato lo tomó y lo tiró por la ventana, la sorpresa y confusión se hacían presentes en su rostro, hasta que le llegó el recuerdo de golpe. - Carajo!..

Meghan intentaba con sus escasas fuerzas salir del espacio entre el asiento trasero y el del conductor donde había caido mientras se quejaba.

-Oye qué carajos pasa contigo amigo? -sale de la prisión y toma asiento nuevamente en la parte trasera con expresión aun medio adormilada y evidentemente mareada. -No te enseñaron a conducir tus papás o qué?, reprobaste el exámen de conducir? -Se quejaba mientras masajeaba su sien de forma circular.

Yoongui baja el volumen del reproductor y se dedica a mirar a Meghan por el retrovisor con expresión confusa y fastidiada.

-Estás bien? -preguntó aunque con cierto desinterés

-NO -Meghan lo mira con indignación - acabas de estampar contra el asiento del conductor a una persona convaleciente idiota.

-Convaleciente? - Yoongui se burla y rueda sus ojos ante el comentario. -No estas enferma, estas ebria y no es mi culpa que se olvidaran de ti, pequeña fantasma.

-Pequeña que? -Meghan frunce las cejas por el apodo impuesto por Yoongui.

-Apareciste de la nada en el asiento trasero de mi camioneta como un jodido fantasma.- Se queja Min.

-Jah!, no lo puedo creer -Meghan ríe con indignación. -Dónde mierdas esta Zhamanta?, y por qué rayos estoy aquí contigo?

Volver a hacer mensión de ese nombre descompone por completo a Yoongui. Ignora por completo las recientes preguntas y nuevamente sube el volumen de la música mientras pisa el acelerador para seguir a su indefinido destino.