Cuando miro para Anasus y ella me mira también yo sonrió, pero en esa sonrisa que le doy se me sale una lágrima y ella me pregunta:
-A: ¿Por qué lloras amor?
-S: por nada amor, eso es simplemente una lágrima que se me escapó, porqué lo qué más estoy es muerto de felicidad porque voy a estar más tiempo al lado del amor de mi vida.
Cuando nos montamos en el bus nos sentamos juntos, cuando él arranca Anasus me agarra de la mano y me la aprieta, yo la miro y la veo un poco pálida, sudada, y fría, al yo verla así me asusto y le pregunto:
-S: ¿Amor estás bien, te sientes bien?
-A: No amor, no me siento bien, yo no soporto montarme ni en bus y ni en carro porque no aguanto estar en lugares cerrados porque siento que me falta el aire.
Cuando ella me dice eso yo cojo y le digo que se siente al lado de la ventanilla para que coja un poco de aire, cuando cambiamos de asiento yo le cojo la mano y la abrazo. Al bajarnos del bus yo le digo que se siente en la parada para que se refresque y se relaje un poco. Cuando vi que empieza a mejorar un poco yo le digo a mi suegra:
-S: Suegra ya Anasus se siente un poco mejor, de aquí a un rato ya podemos irnos para su casa.
Al llegar a la casita de mi suegra yo la ayudo a desocupar las maletas. Al terminar de ayudar a mi suegra con las maletas, cojo y llamo a mi abuela (la mamá de Luis) y le digo hoy yo ni iba a ir para su casa, al ella escu har eso me dice:
-X: ¿Y eso por qué? ¿En dónde te vas a quedar?
-S: En casa de mi suegra, es que ella me invitó a almorzar y a comer en su casa.
-X: ¿Oh qué bueno, te felicito, ya veo que te está hiendo bien con la noviecita? ¿Mañana vas a venir para acá?
-S: Sí, me está iendo bien con Anasus, y sí mañana voy a ir para tu casa ha hecharme el día. Te dejo, que tengas un buen día.
Al colgar el teléfono yo cojo y entro en la casita de mi suegra para estar al lado de Anasus y pasar el mayor tiempo posible con ella. Yo le digo casita a la casa del marido de mi suegra porque su casita nada más tiene un cuartico, un bañito, y una cocinita, y el pasillo para poder entrar. El suelo era de piedra blanca y lisa; las sillas de respaldo alto, de forma anticuada y pintadas de blanco.
Bajo la cama reposaba un pequeño perro pequinés de color amarillo un poco carmelitoso. La mesa redonda estaba ubicada en el mismo cuarto al lado del refrigerador, pero eso no importa porque lo que más me importa a mi es que voy a estar en un lugar seguro y con la mujer que amo.
Cuando llegamos mi suegra nos había empezado a preparar el almuerzo porque ninguno había comido nada. Al rato después de ella estar haciendo el almuerzo llega el padrastro de Anasus. Al él llegar saluda a mi suegra, a Anasus y a mi, después de saludarnos me pregunta -¿Quieres café? Un asentamiento de cabeza fue mi respuesta.
Al darle mi respuesta sobre la pregunta que me había hecho él se levanta y va para la cocina a preparar un poco de café para nosotros, menos para Anasus porqué a ella no le gusta él café.
Después de haber estado el almuerzo Anasus y yo nos sentamos en la cama para almorzar porque ahí en la casa no hay espacio para poder sentarnos en la mesa a almorzar los cuatro. Mi suegra y el padrastro de Anasus se sientan en la silla, después de haber terminado de almorzar mi suegra me sirve una taza de café, yo salgo con Anasus para el pasillo que da a la calle a fumarnos un cigarrillo.
Después de eso Anasus me dice:
-A: Amor voy haber si me acuesto para descansar un rato.
-S: Está bien mi vida, acuéstate y descansa, que debes estar muy ajetreada del viaje y las caminatas que hemos hecho hoy.
-A: Amor acuéstate conmigo un rato para dormir juntos los dos como hacíamos cuando estábamos en casa de mi suegra cuando me fui en diciembre.
-S: Está bien amor, me voy a acostar contigo un rato para así poder recordar los viejos tiempos de cuando estábamos el día entero juntos y no nos separábamos ni un instante, y para pasar este poco tiempo que nos queda lo más juntos posible.
Al acostarnos yo en vez de ponerme a dormir como hizo ella, yo lo que hacía era estar a su lado observando como dormía, su cabeza estaba sobre mi brazo izquierdo mientras que con el derecho yo le acariciaba el pelo.
Mientras yo hacía eso a mi mente venían todos los bellos momentos que hemos pasado juntos, porque para mi los momentos tristes eran cuando yo me tenía que separar de ella. Mientras pensaba en eso y le acariciaba el pelo yo me quedo dormido.
Cuando mi suegra viene a despertarnos para bañarnos Anasus y yo, que le pregunto que qué hora es ella me dice que son las siete de la noche, yo me sorprendo y digo para dentro de mí (wow como dormí) Después de eso cojo y despierto a Anasus para coger y bañarnos juntos; cuando se despierta yo le digo:
-S: Buenas noches mi dormilona, cómo durmió mi cosita bella, a lo que ella me contesta media dormida.
-A: Buenas amor, ¿Qué pasó? Porqué me despertaste.
-S: No pasó nada amor, tú mamá fue la que me despertó para que fuéramos a bañarnos, ella me dijo que sí quería podíamos bañarnos juntos.
Después que ella se terminó de levantar yo le digo que busque la ropa que se va a poner que yo voy a llevar el agua para el baño para así poder bañarnos juntos.
