45.Flores

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Caminaba por las calles con las manos en los bolsillos y los audífonos a todo volumen, dándole vueltas a la misma pregunta: ¿qué sería lo correcto en esta situación?

Matias me había dicho que no había problema en llevar flores a una primera cita. Pero ni siquiera podía llamarla "cita" porque, en realidad, no nos conocíamos, y yo ni siquiera la había invitado a salir.

Era casi una cita a ciegas. No conoces a la persona, no tienes idea de quién es, pero vas porque tus amigos prácticamente te obligan.

Llegué a la florería local. Nunca me había gustado comprar flores. Las compras para que se marchiten y dejen de iluminar un lugar que, al final, sigue igual de vacío que antes. Solo que ahora, la imagen de la muerte flota en un jarrón con agua.

Me quité los audífonos cuando una señora mayor me atendió con una sonrisa mientras acomodaba algunas plantas en la mesa del centro.

-¿Buscabas algo en específico, guapo? -preguntó después de que la saludé.

-No lo sé... -respondí, pasándome una mano por el cabello-. Algo formal, pero no demasiado especial.

-"Formal" puede significar muchas cosas en el lenguaje de las flores -respondió con un toque de sabiduría-. Una disculpa, una cortesía... -divagó un poco-. Pero no te preocupes, te ayudaremos con eso. Pasa por acá.

Me guió a un espacio con aún más flores y macetas colgando de las paredes.

-_____ ¡Nena! ¿Le podés ayudar a este chico guapo? -llamó por el lugar mientras traía unas tijeras y papel para la mesa del centro.

Cuando me acerqué, una chica con un moño mal hecho en su cabello castaño se golpeó la cabeza al levantarse.

-¡Auch!-se quejó la chica, llevándose una mano a la cabeza mientras fruncía el ceño.

Por un instante, me quedé en silencio, sin saber si debía preguntar si estaba bien o hacerme el distraído. Pero ella me miró antes de que pudiera decidir.

-¿Qué necesitas? -preguntó, frotándose la cabeza y acomodándose el moño con un gesto distraído.

-Flores -dije, sintiéndome un poco estúpido por la obviedad de mi respuesta.

Ella arqueó una ceja, divertida.

-Ya veo.No te imaginaba llegar por abono para arboles-Hablo de forma sarcástica.Su comentario hizo que se me soltara una risita

-No por ahora.Sólo algo...formal -

Se mordió el labio inferior mientras miraba a su alrededor intentando formular una idea de lo que quería con tan poco explicación de mi parte.

-Formal...¿Para que es?.

No se porque dude antes de responder.Decir "una cita" me pareció demasiado, y decir "una no cita" era ridículo. Así que, sin pensarlo mucho, solté lo primero que se me ocurrió:

-Para un amigo.

-O eres un detallista de primera o tu amigo es un fanatico de las flores -Camino fuera del mostrador en busca de las flores que pensaba-

-Ninguno de los dos.Solo hace mucho que no lo veo -me excuse rascandome la nuca sintiéndome un poco intimidado -

Ella no dijo nada por un momento, solo me observó con una expresión que no supe leer del todo. Luego, con una leve sonrisa, se giró hacia las flores.

-Bien, veamos... Algo que no parezca demasiado, pero que tampoco sea indiferente...

Se movió entre los estantes con una facilidad casi natural, tocando suavemente los pétalos de algunas flores, evaluándolas con la mirada. Yo la seguí sin decir nada, aunque en realidad, ni siquiera estaba viendo las flores.

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⏰ Última actualización: 6 days ago ⏰

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One Shots---Enzo VogrincicDonde viven las historias. Descúbrelo ahora