Un chico cualquiera

Capítulo 7 "Desgracias: primera parte"

Cuando llegue al colegio en la mañana, decidí sentarme cerca de la ventana, atrás de donde Violeta siempre se sentaba, quise darle una sorpresa, de igual manera así estaria lejos de los demás, después de conocer a violeta, ya no me sentía solo.

Sonó el timbre y las clases comenzaron, el día fue demasiado aburrido, puesto que Violeta nunca llegó, a la salida, me tope con Steve y comenzo a molestarme de nuevo, yo lo ignore y continue mi camino, llegue a mi casa y mi madre llegó un poco después con mi hermana, mi madre me dijo que si tenía planes y le dije que no, me dijo que nuestra vecina le pidió que le mostrara el vecindario a su hijo y como ella no podía me dijo que yo se lo mostrara, puesto que no tenía mensajes de nadie, opte por decirle que sí, así que fui a mi habitación a cambiarme y después me dirigí a casa de mi vecino. Llegando a la puerta, toque el timbre y salió una joven muchacha, ella me sonrio y me preguntó qué necesitaba, yo le dije que llamará a su hermano y lo hizo, luego me dijo que le saludara a mi hermano y se retiró, antes de que lo notará, mi vecino salió:

-Hola-me dijo seriamente.
-ah, qué tal.
-¿Qué se te ofrece?
-Mi madre me dijo que querias conocer el vecindario y decidí mostrartelo.
-Cierto, lo olvidé, ya vuelvo.

Después de 10 minutos, salió y me dijo que nos fueramos cerrando la puerta tras de él.
****

Entramos en una cafetería que estaba un poco después del parqué, tomamos asiento en una mesa y pedimos dos capuchinos, mientras esperabamos yo no sabía como comenzar el tema, así que le dije:

-Oye, nunca me haz dicho tu nombre.
-¡Oh!, es cierto, pienso que si vamos a pasar tiempo juntos debemos conocernos, me llamo Éter, mucho gusto...
-Derek-interrumpi mientras hablaba-me llamo Derek.
-Entonces, es un gusto conocerte, Derek.
-Lo mismo pienso, Éter.

La mujer llegó con dos Capuchinos en una bandeja y luego miro a Éter y timida le pregunto su nombre, el se lo dijo y la muchacha le pidió que si podían salir, a lo que Éter respondio que si, luego de eso, ella se retiro con una gran sonrisa, yo mire a Éter y decidí hacer una pequeña broma.

-Creo que andas de suerte,¿no crees?
-Claro que no.
-Es linda, deberías conocerla.
-Vamos viejo, se va a cansar de mi.
-No lo creo, pero te deseo suerte.
-Callate-me dijo seríamente mientras yo reía.

Después de terminar nuestro café, salimos para continuar, le dije en donde estaban todas las escuelas y por cuales lugares pasaban los transportes. Llegamos al parque, le dije que nos sentarámos en una banca,, cuando nos sentamos, hubo un muy largo silencio, decidí decir algo para romper el silencio, pero cuando iba a comenzar , él me interrumpio:

-Ella...la chica con la que estas siempre, la de cabello negro, ¿te gusta?
-Eh...eh...-le dije nervioso-Sí, sí me gusta,¿por qué?
-lo que sucede...
-¿Qué pasa con ella?-le dije alzando la voz.
-La noche que saliste con ella, iba de regreso a mi casa, yo había salido con mis padres, y vi una ambulancia, esta salió de su casa...
-¡¿Qué?!-le dije alterado- ¡¿ella iba dentro?!
-No lo sé, la ambulancia iba demasiado rápido.
-Lo siento-le dije levantandome- te tengo que dejar, necesito ir al hospital.
-Esta bien, nos vemos luego, lamento no habertelo dicho antes
-No importa-salí corriendo hacia el hospital sin siquiera mirar atrás...

*****

Entre a la recepción, agitado, pregunte a la enfermera por Violeta Simons, ella me indicó el pasillo y me dijo que se encontraba en la habítación 10, yo le agradeci y comenze a correr hacia su habitacion, comenze a observar los números de cada puerta hasta que por fin llegue, al llegar no vi rastro algúno de la familia de Violeta, entre y vi a Violeta recostada en su cama, tenía gasas y vendas en los brazos, también tenía un suero conectado a su brazo izquierdo; me acerqué rápidamente a ella para ver que estuviera bien, me senti calmado al ver que ella seguía viva, mire la mesa que estaba a su lado y pude ver gasas llenas de sangre, sorprendido me sente y la tome de la mano, me quede junto a ella por una hora, luego me levante, me acerqué a ella depositando un beso en su frente y me di vuelta para salir, al estar en la puerta, pude escuchar su meliflua voz diciendo mi nombre, como un susurro.

-Derek...
-Me gire y le sonrei-¿si?
-Gracias...

Y Violeta volvío a caer dormida
****

Han pasado ya dos meses desde que visite a Violeta en el hospital, todos los días son como antes de conocerla, aburridos y sin sentido alguno, es bueno saber que ella está bien, pero no creo soportar mucho más sin ella, mi relación con Éter ha crecido demasiado, se ha convertido un muy buen amigo, Steve y todos ellos me han ignorado, creo que no me toman importancia ya, extrañamente Jennifer me ha estado hablando demasiado, sé podria decir que esta volvíendo a tener confíanza en mi, hoy tengo que llegar temprano a mi casa, prometi salir con mi hermana a la heladeria. Mientras estaba cerrado en mis pensamientos, la maestra me pidio que continúara con la lectura, yo me levante y antes de comenzar, sonó el timbre de salida, la maestra nos indicó que podíamos salír, yo espere a que todos salieran, al salir, senti un pequeño tirón en mi mochila, me gire para poder ver quien era y vi a Jennifer, ella me sonrio.

-¿Te vas solo?-me dijo riendo.
-¿Ah?,no, bueno, sí, eso creo, pero,¿por qué sigues aquí?
-Quise esperarte-me dijo sonríendo
-Oh, esta bien,¿nos vamos?
-Claro, vamos.

Salimos de la escuela y comenzamos a caminar hacía su casa, mientras caminabamos, ella me contaba muchas bromas, pero yo estaba muy distraído en mis pensamientos, por desgracia, estaba tan cerrado en mis ideas que me estrelle contra un árbol y caí en el suelo, Jennifer comenzo a reir descontroladamente, yo me reí un poco, pero era más el dolor que sentia en mi cara, ella me ayudo a levantarme aguantandose la risa, le dije que continúaramos, caminamos hasta llegar hacía su casa, me despedí de ella y decidí dirigírme a mi casa, cuando estuve solo, saque mis cascos de la mochila y comenze a escuchar música, cuando llegue a mi casa, abrí la puerta, me quite los cascos y arroje la mochila al sillón, escuche la voz de mi madre y decidí seguírla, subi las escaleras y pude ver que su voz provenia del cuarto de mi hermana, me acerqué a la puerta para poder escuchar y cuando estuve lo suficiente mente cerca mi madre salió molesta, me miro y me dijo que no fuera a perder el tiempo con una niña inútil, la mire indiferente y entre al cuarto de mi hermana, ella estaba sentada llorando en la orilla de su cama, me acerqué a ella y me puse en cuclillas.

-¿Qué te pasa?
-¿Mi mamá me odia?-me dijo mirandome a los ojos
-¿Qué?, no,¿por qué lo dices?
-Ella me lo dijo.
-Ella no te odia, sólo esta molesta.
-Esta molesta por mi culpa, yo la hice enojar.

Yo la mire, entonces decidí abrazarla, no sabía que había sucedido para que mi madre regañara a mi hermana de esa manera, me quede con ella un momento, cuando se calmo, la mire y me dio una tranquila sonrisa, me levante de su cama y le pedí que durmiera, le dije que luego iríamos por su helado y me despedí, cerre su puerta y baje, mi madre estaba sentada en el sillón con una botella de alcohol casi vacía, me dirigi hacia en donde estaba y me sente delante de ella.

–¿Por qué le dijiste eso a Alejandra?–le dije molesto.
-Esa estupida niña sabe por que lo hice–después dio un trago a su vaso y lo volvío a llenar.
-¿Pero qué...?, hace poco tiempo era tu hija favorita, ¿¡ahora la odias!?
-Sí, no sé por que la traje al mundo, debi abortarla cuando tuve la oportunidad, sólo ha traido problemas a esta familia.
-Pero,¿por qué dices eso?
-Por que por recoger a esa niña perdí mi trabajo, tenía una junta importante, hubiera tenido el mejor puesto, pero por esa estupida niña lo perdí, ahora ya estaria lejos de este basurero,¡lejos de ustedes!
-¿Lejos de nosotros?,¿A qué te refieres mamá?...